La minera estatal sufrió un traspié en dos sindicatos de la División Andina, luego de que los trabajadores decidieran rechazar en las urnas la propuesta.
Los sindicatos Industrial de Integración Laboral (SIIL) y Unificado de Trabajadores (SUT) de la División Andina de Codelco decidieron rechazar la oferta final del proceso de negociación colectiva anticipado, con un 73,5% de los votos frente a solo un apoyo a la propuesta del 26,3%.
Los trabajadores que pertenecen al rol B de Andina rechazaron la última oferta de la estatal, terminando con una racha de negociaciones en esta modalidad que la minera ha logrado cerrar exitosamente. Sin embargo, ahora, la negociación colectiva deberá iniciar nuevamente en junio, dado que el contrato colectivo vence el 31 de julio.
“La oferta no cumple con las expectativas y por los temas que se trataron, los trabajadores vieron mejor ir a un proceso reglado que anticipado. Eso es, por los intereses que tiene la compañía”, explicó el presidente del Sindicato Industrial de Integración laboral (SIIL) de Andina, Nelson Cáceres.
De acuerdo a un comunicado emitido por las organizaciones, el proceso de negociación colectiva reglada, «debe darse dando cumplimiento a lo que establece la ley, en lo que se refiere a plazos y forma, lo que será informado próximamente».
Cabe mencionar que Codelco presentó una oferta cuyo beneficios sumaban cerca de $11,5 millones y que consistía en un bono de término de negociación de $4,5 millones, un crédito blando de $2,5 millones y el pago de $1,5 millones por el bono de jornada excepcional, además de otros beneficios. También consideraba reajuste cero y un contrato colectivo a 36 meses. Pero los trabajadores estarían mirando más hacia los resultados que hace unos días lograron los trabajadores de mina y planta de Los Pelambres. Antofagasta Minerals cerró el martes su única negociación colectiva del año y logró evitar una huelga ofreciendo beneficios que sumaron $19,5 millones y un reajuste salarial.
Según un comunicado interno de la empresa al que tuvo acceso Diario Financiero, el gerente general de Andina, Rodrigo Barrera, señaló que las negociaciones colectivas –tanto las anticipadas como las regladas– son instrumentos laborales que permiten acercar posiciones. «Lamentablemente hoy no logramos un acuerdo, teniendo en consideración que realizamos un tremendo esfuerzo dada la situación divisional, pero continuaremos con nuestra disposición al diálogo en el proceso reglado», agregó.
En relación a los desafíos de mediano plazo, el ejecutivo enfatizó que «la posición competitiva de Andina está deteriorada, y por tanto es urgente que el proceso de transformación se materialice en el más breve plazo».
«Nosotros nos debemos a Chile, y el país espera que obtengamos el mayor rendimiento de nuestros recursos y activos mineros, y para eso necesariamente debemos evolucionar y dejar atrás prácticas obsoletas que hacen inviable nuestra proyección futura», señaló.