En Chile, el índice ICE quedó «relativamente estable» (-1,4 puntos), mientras que Argentina, Uruguay y Paraguay registraron bajadas por encima de los 10 puntos.
El clima para los negocios en América Latina tuvo una leve mejora en los últimos tres meses por el alza en los precios de las materias primas, pero sigue en una situación «muy desfavorable», según un estudio divulgado este viernes por el centro brasileño de estudios económicos Fundación Getulio Vargas (FGV).
El llamado Indicador de Clima Económico (ICE) en Latinoamérica, medido cada tres meses por la FGV, presentó una nueva mejora, con lo que encadenó su cuarta subida consecutiva, a pesar de los fuertes impactos de la pandemia del nuevo coronavirus en la región.
El índice avanzó desde los 70,5 puntos en el primer trimestre hasta los 81,2 puntos en el segundo (los datos son divulgados en el segundo mes del período), lo que supone un alza de 10,7 puntos pero que lo mantiene en la «zona desfavorable del ciclo económico».
La institución indicó que, si bien las expectativas con respecto a los próximos meses «son optimistas», la percepción sobre la situación actual «es aún muy desfavorable».
Subrayó que la pandemia de la covid-19 es aún «un problema en todos los países», pero la mejora de la demanda mundial y el aumento de los precios de las materias primas influyó «positivamente en la revisión del crecimiento económico para 2021 en la mayoría de los países de la región».
El ICE se obtiene con base en dos indicadores: el de la Situación Actual (ISA) y el de Expectativas (IE), que mide la proyección de los economistas de diversos países para los próximos seis meses. En los tres indicadores se considera clima «favorable» cuando se está por encima de los 100 puntos.
En este marco, el ISA de la región subió 8,8 puntos (o una variación del 45,4 %) con respecto a los tres meses anteriores hasta los 28,2 puntos, un nivel «extremadamente bajo si se considera que el límite del paso entre las zonas desfavorable y favorable es de 100 puntos».
Por su parte, el IE pasó desde 143,6 puntos a 156 puntos, lo que mantiene el indicador en la zona favorable.
Entre los países analizados por el estudio, Colombia fue el que registró la mayor variación positiva, de 22,5 puntos, en el ICE, impulsada por la mejora de la evaluación de la situación actual, que no reflejó, sin embargo, las violentas protestas que han paralizado el país durante las últimas semanas.
Además de Colombia, Bolivia y México presentaron variaciones positivas en los tres indicadores, mientras que Perú obtuvo la segunda mayor subida en el indicador general, pese a la ligera caída en las expectativas para los próximos seis meses.
Ya Brasil y Ecuador mejoraron la percepción del clima de negocios aupados exclusivamente por el aumento del indicador de las expectativas.
En Chile, el índice ICE quedó «relativamente estable» (-1,4 puntos), mientras que Argentina, Uruguay y Paraguay registraron bajadas por encima de los 10 puntos.
La FGV destacó que «todos los países latinoamericanos analizados figuran en la zona desfavorable de clima económico», a excepción de Paraguay, que está en la «frontera» de los 100 puntos.
«Todos los países registran indicadores desfavorables en la evaluación de la situación actual y todos muestran expectativas favorables en relación con los próximos meses, excepto Argentina», señaló el estudio.
Los analistas consultados indicaron que la previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) para Latinoamérica en 2021 será del 4,3 %, con los mayores avances para Perú (7,9 %), Chile (6,1 %) y Argentina (5,8 %).
No obstante, los expertos consideraron que un posible recrudecimiento de la pandemia del coronavirus en la región, la falta de confianza en la política económica y de innovación son los principales desafíos para conseguir un mejor ambiente de negocios en América Latina.