La consultora señala un desempeño deficiente en lo económico y político. Aboga por reformas estructurales —tributarias, previsionales, de infraestructura, educativas y de modernización estatal—, pero enfatiza la necesidad de cambios en el sistema político para facilitar la construcción de acuerdos.
Chile enfrenta un panorama sombrío en términos económicos y políticos. Así lo indica el reciente informe de la consultora Gemines —liderada por los economistas Alejandro Fernández y Tomás Izquierdo—, que si bien apunta a una “performance” en los últimos años “muy negativa” tanto en lo económico, como en lo político institucional, destaca la necesidad de cambios estructurales —como la reforma al sistema político— para revertir el deterioro observado en la última década.
Según el informe, el desempeño de Chile ha sido decepcionante desde varias perspectivas. Entre los problemas, Gemines apunta a una crisis de seguridad, retrocesos en educación, deterioro institucional y un estancamiento económico con crecimiento promedio estimado de apenas el 1,9 % anual entre 2018 y 2024. Este rendimiento, recalcan, es insuficiente frente a las necesidades sociales y económicas del país.
No obstante, la consultora fundada en 1974 por Álvaro Bardón junto a otros Chicago Boys, sostiene que el tema del crecimiento económico está reapareciendo en el debate público, y —plantea— es altamente probable que ocupe un lugar central en una próxima campaña presidencial. “Incluso sectores tradicionalmente críticos del crecimiento económico, como el Frente Amplio, ahora reconocen su importancia para responder a las demandas sociales”, señala el informe.
Para revertir esta situación, Gemines propone una serie de medidas que, aunque técnicamente ya están consensuadas, requieren una capacidad política que permita construir acuerdos amplios. Entre las principales propuestas destacan:
El informe enfatiza que muchas de estas reformas enfrentan intereses creados y requieren un sistema político más funcional para su implementación. En línea con lo planteado por los proyectos actualmente en discusión, Gemines remarca que la fragmentación parlamentaria actual dificulta acuerdos amplios, necesarios para reformas legales de gran alcance. Por ello, señala que los cambios al sistema político, como los discutidos en el Congreso, son “claves para destrabar el desarrollo del país”.
Cabe mencionar que, el debate por la reforma al sistema político se estancó en el Senado, tras no lograr votar en general debido a la solicitud de revisión de distintas bancadas sobre el proyecto que —entre otras cosas y en paralelo a iniciativas similares en la Cámara– busca establecer un piso del 5% para acceder a escaños, la pérdida de escaño para quienes renuncien al partido y el aumento de requisitos para nuevos partidos.
“Aunque la votación de nuestro proyecto fue postergada, tenemos la plena convicción de que cuenta con el apoyo necesario y que será votado mañana, conforme a nuestro reglamento”, comentó este martes la senadora Paulina Núñez (RN), integrante de la Comisión de Constitución.
“Insistiremos mañana en llevar nuestro proyecto a votación en la Sala. Este busca, en definitiva, asegurar que quien gobierne pueda al menos aspirar a construir una mayoría y, de esa forma, fortalecer la gobernabilidad del país. No tengo dudas de que el proyecto, que cuenta con un respaldo transversal desde su presentación, obtendrá los votos necesarios para seguir avanzando en su tramitación y pasar al análisis particular en la Comisión de Constitución, de la cual formo parte”, añadió la legisladora.
Con tres proyectos actualmente en el Congreso, para el Presidente Gabriel Boric, los últimos 12 meses de su mandato son la última oportunidad que tiene para concretar las reformas al sistema político y al sistema previsional. Estas reformas no sólo son imprescindibles, sino que definirán la percepción de su gestión y serán la base sobre la que se construirán las propuestas de su coalición en el futuro.