La adopción por parte del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de políticas que su predecesor descartó lleva a capitular a quienes apuestan contra el euro.
Desde el 26 de julio, cuando Draghi dijo que haría “lo que haga falta” para salvar el euro, que comparten 17 países, la moneda se ha apreciado contra todas sus grandes 16 pares, según un análisis de Bloomberg. El costo de proteger de un impago la deuda gubernamental en Europa occidental declinó al punto más bajo en 15 meses y mejora la confianza en el sistema bancario de la región en momentos en que las acciones de bancos suben 33 por ciento desde el 1 de junio y superan el aumento de 18 por ciento del índice Stoxx Europe 600.
El ex presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, evitó que el banco central apuntalara a los gobiernos endeudados mediante la limitación de las compras de sus valores conforme se profundizaba la crisis, pero Draghi ha hecho lo contrario desde que entró funciones en noviembre. Sus decisiones instalan en el lado errado del mercado desde al ex economista jefe del Fondo Monetario Internacional, Kenneth Rogoff, hasta al administrador de fondos, Axel Merk.
“Ha cambiado las cosas, y Draghi ha tenido a su cargo el trabajo pesado”, dijo Merk, presidente y fundador de Merk Investments LLC en Palo Alto, California, en entrevista telefónica del 13 de septiembre. Su Merk Hard Currency Fund de US$526 millones ha trepado 3,38 por ciento el último mes y ha superado al 92 de sus pares, según datos que recopiló Bloomberg.
Posibilidades de desintegración
Draghi, que tiene 65 años, se ha mostrado más dispuesto que Trichet a usar el balance del BCE para ayudar a España e Italia. También redujo la insistencia de su predecesor en que los tenedores de bonos senior de bancos en problemas no debían sufrir pérdidas en caso de rescate.
Merk, que dijo este año que tenía una posición “muy negativa” respecto del euro debido a lo que calificó de proceso disfuncional en la resolución de la crisis de Europa, se ha convertido en comprador. “El euro puede fortalecerse mucho más, si bien aún no está fuera de peligro”, dijo.
Las posibilidades de una desintegración de la unión monetaria para fines de 2013 declinaron a 50 por ciento, mientras que eran de 60 por ciento a fines de julio, según datos de intrade.com, que tiene sede en Dublín, luego de que Draghi diera detalles de un plan anunciado en agosto de compra de deuda de miembros, entre ellos España e Italia.
El euro se apreció 3,93 por ciento el último mes contra una canasta de otras nueve monedas de mercados desarrollados, incluido el yen, la libra y el dólar australiano, y es el principal ganador, según los índices ponderados por correlación de Bloomberg.
Mejor pronóstico
Lo que las autoridades europeas “han demostrado hasta ahora es su disposición a apoyar la unión monetaria y a hacer todo lo posible”, dijo Mary Nicola, una estratega cambiaria en Nueva York de BNP Paribas SA.
BNP Paribas tiene la estimación más alta del euro para fin de año entre los 50 estrategas que consultó Bloomberg y pronostica que la moneda se fortalecerá a US$1,35. El promedio histórico del euro desde su creación en 1999 es de alrededor de US$1,21.
La creciente confianza en Europa ayuda a los mercados globales. El índice MSCI All-Country World de acciones ha aumentado 17 por ciento respecto de su punto más bajo del año del 4 de junio. El índice GSCI de materias primas de Standard Poor’s subió 25 por ciento respecto de su nivel más bajo de 2012 del 21 de junio. Los bonos empresariales han retornado 4,8 por ciento desde fin de marzo, lo que comprende la reinversión de intereses, según datos del índice de Bank of America Merrill Lynch.
Las acciones bancarias del índice Stoxx Europe 600 han trepado a su nivel más alto desde el 21 de marzo.
Cambio de sentimiento
Hace apenas tres meses, las apuestas contra la capacidad de Draghi de mantener la unión monetaria alcanzaban un alto nivel récord.
La diferencia en cantidad de apuestas de fondos de cobertura y otros grandes especuladores sobre una caída del euro en comparación con las apuestas a un aumento era de 214.418 el 5 de junio, la mayor de la historia, según indica la Comisión de Comercio en Futuros sobre Mercancía, CFTC por la sigla en inglés, que tiene sede en Washington. Eso equivale a US$33.400 millones de apuesta contra el euro.
La protección contra pérdidas en la deuda senior de 25 bancos y aseguradoras con permutas de riesgo crediticio creció más de 50 por ciento entre marzo y julio. Los rendimientos de los bonos españoles a 10 años treparon el 27 de julio a un récord de la era del euro, 7,75 por ciento, conforme el país buscaba un rescate de sus bancos.
Rogoff, que en la actualidad es profesor de economía de la Universidad de Harvard en Cambridge, Massachusetts, dijo el 27 de julio a Tom Keene en “Bloomberg Surveillance” que si bien estimaba que Grecia terminaría por abandonar el euro, “la verdadera pregunta es qué va a pasar con el euro en términos más amplios”.
Panicos Demetriades, un miembro del Consejo Gobernante del BCE, dijo que el banco podría no tener que gastar un centavo en compras de bonos. La amenaza de compras ilimitadas en el marco de nuevas compras de bonos del BCE podría significar que “termine por no hacer falta acción alguna”, dijo.
“La forma en que actuó lo convierte en un genio”, dijo Merk, haciendo referencia a Draghi. “Ha logrado hacer lo que los políticos no han podido sin volcarse demasiado a la política”.