Argentina está dando señales de que son remotas las probabilidades de que los tenedores de títulos atados a la economía reciban un pago de US$3.600 millones, lo que resulta ser una bendición para los bonistas del país.
En tanto los llamados cupones PIB se desplomaron 2,7 por ciento, hasta 6,75 centavos por dólar, desde que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo el 3 de abril que una revisión del crecimiento significaba que ya no correspondía un pago, los pagarés de Argentina denominados en dólares subieron 1,3 por ciento a raíz de las apuestas a que la medida contribuirá a preservar las reservas en moneda extranjera que el gobierno utiliza para pagar a los bonistas. El aumento es más del doble que la media para América Latina.
Argentina, cuyas reservas cayeron hasta un mínimo en siete años, cambió el año base para el producto interno bruto de 1993 a 2004, lo cual le permite rebajar aproximadamente 1,9 puntos porcentuales al crecimiento del año pasado. Si bien la revisión forma parte del intento de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de aumentar la credibilidad de los datos económicos después de haber sido censurada por el Fondo Monetario Internacional, los términos de los cupones indican que Argentina también puede bajar el umbral para justificar los cambios y realizar el pago.
“Es una buena noticia para el resto de los inversores y otros bonos se negociaron más arriba porque significa que Argentina no está despilfarrando US$3.000 millones”, dijo en una entrevista telefónica desde Miami Russ Dallen, operador principal de Caracas Capital Markets. “Vienen realizando un esfuerzo para ordenar sus números y en este caso fue en su beneficio porque no tendrán que pagar”.
Revisión del crecimiento
Los cupones, que fueron emitidos como parte de reestructuraciones derivadas de la cesación de pagos de Argentina sobre US$95.000 millones en 2001, cayeron ahora 23 por ciento desde el 28 de marzo, cuando el gobierno dijo que la economía creció 3 por ciento en 2013, por debajo del disparador de 3,22 por ciento. En septiembre, Argentina había pronosticado un crecimiento de 5,1 por ciento.
La cifra del crecimiento para 2013 se corresponde ahora con la estimación media de 2,9 por ciento de los economistas privados, según un índice publicado por legisladores de la oposición.
El prospecto requiere que el gobierno brinde la cifra de crecimiento correspondiente a 2013 utilizando como base 1993, según un informe de Citigroup Inc. publicado el 31 de marzo. Sobre la base de datos mensuales de la actividad económica, el PIB creció probablemente 4,9 por ciento, lo cual reduciría el umbral de crecimiento para un pago hasta 1,3 por ciento. En esa hipótesis, los inversores de todos modos cobrarían y podrían alzarse con un cupón de 6,7 centavos por los warrants denominados en dólares, dijo Citigroup.
En tanto el ministro de Economía Axel Kicillof dijo en una entrevista con el canal C5N TV el 6 de abril que Argentina determinará si realiza el pago de los cupones en septiembre cuando se completen las series de datos y cifras, es poco probable que el gobierno pague, según Siobhan Morden, responsable de renta fija para América Latina en Jefferies Group LLC.
“Argentina interpretará el lenguaje como mejor le convenga”, dijo en una entrevista telefónica desde Nueva York. “Si usted no está de acuerdo, puede ir a la justicia para demandar a Argentina y ponerse en la cola con todos los demás”.