En medio de la polémica soterrada entre Itaú y Saieh, la Sbif decidió tomar cartas en el asunto y acordó el viernes pasado oficiar a Saieh para que informe detalles de lo ocurrido con las acciones que no fueron informadas originalmente.
La rectificación de la propiedad de CorpBanca en la entidad resultante de la fusión con el banco brasileño, inmaterial para algunos y sustancial para otros, ha sido un inesperado dolor de cabeza para el ejecutivo.
El hecho esencial comunicado el miércoles por el banco de Álvaro Saieh abrió un escenario controvertido luego que revelara que, tras la rectificación, CorpBanca finalmente tendrá un 33,13% de participación y no 32,92%, como anunció inicialmente. Con la nueva cifra, el pacto controlador llega a 66,71%.
El anuncio puso en "veremos" una operación que viene maquinándose hace más de un año, ya que generó una discusión, innecesaria a esta altura, respecto de la obligación de lanzar una OPA por parte de ambas compañías a los accionistas minoritarios de la entidad fusionada, un hecho que Itaú lo da por descartado, pero que no está zanjado.
Oficialmente ambas partes insisten en que la operación no corre riesgo, pero hay molestia de parte del banco brasileño con Álvaro Saieh, a quien responsabilizan por el error.
Hasta ahora sólo Itaú ha comunicado su visión del asunto, enfatizando que los nuevos términos de la fusión no suponen un impacto para la operación, “permaneciendo Itaú Unibanco como el controlador del nuevo banco”, al tiempo que tampoco “habrá necesidad de lanzar una oferta pública de adquisición de acciones (OPA)”, la que, de efectuarse, gatillaría el fracaso del deal.
En el entorno de CorpBanca aseguran que la responsabilidad es compartida. "El error evidentemente es de todos. Hay dos hechos esenciales de las dos entidades involucradas", explican cercanos a Álvaro Saieh.
Sin embargo, fuentes informadas dicen que el rol de CorpGroup, como propietario de las acciones en cuestión, es clave. “Son ellos los dueños de las acciones, y en estos procesos los controladores están siempre presentes en los procesos de recolección de información que hace un banco de inversión”, sostiene un conocedor del asunto.
Es un argumento que también tendría la Sbif y se lo habrían comunicado, así como la decisión de mandar el oficio.
Aunque es vox pópuli en el mercado que, pese a esta aparente proactividad de Parrado, el regulador tendría tomada la decisión de aprobar la fusión, pues con ello se zanja definitivamente la solidez financiera del grupo que controla Saieh, impactado en los últimos años por el maltrecho pasar de SMU y las irregulares fórmulas de financiamiento desde el banco a la cadena supermercadista.
El malestar de Itaú con CorpGroup se debe a que aún no tienen claro de dónde vino el error y, al respecto, estaría conduciendo su propia investigación. Señalan que las acciones que habrían causado el "error" estaban vinculadas al holding y en custodia en una corredora. Este medio no pudo descubrir el nombre de dicha corredora, pero la Sbif sí tendría la información. Al menos dos fuentes revelaron a este medio que Marino, que por lo menos hasta ayer seguía en Chile, habría hecho saber su molestia en forma directa a CorpGroup.
Marino también habría hablado con los socios con los cuales su familia controla el banco y estarían contemplando lo que implicaría hacer una OPA si esa es finalmente la decisión del regulador bancario. Hasta ahora Itaú ha dejado en claro que, frente a una eventual exigencia de OPA en esta operación, la fusión se cae gracias a las cláusulas de salida acordadas con CorpBanca. Saieh tampoco estaría interesado en una OPA.
Cercanos a Saieh insisten en que el número de acciones no ha cambiado y que fue simplemente un error de cálculo al traducirlos a porcentajes.
Esa versión resulta inverosímil para el mercado, dados los filtros que tuvo que pasar la operación y los abogados y banqueros que participaron.
Junta de accionistas no sería hasta segundo semestre
Con el oficio de la Sbif y lo que ha pasado, es probable que la junta de accionistas no se realice tan en el corto plazo como estaba previsto. Ya no será en marzo ni abril, sino que todo apunta a que esto quede para fines del primer semestre, es decir, junio.
Fuentes cercanas a CorpGroup explican que, una vez que se haga la consulta oficial a la Sbif sobre si corresponde o no OPA, esta volverá a pedir el pronunciamiento de la SVS como lo hizo la primera vez.
Una vez que se tenga respuesta, ya se puede pensar en citar a la junta de accionistas.
Si bien todo el proceso de consulta, en el mejor de los casos, puede avanzar rápido, el problema es que el banco tiene la exigencia de presentar a los accionistas, para aprobar la fusión, estados financieros auditados 90 días antes de que se pronuncien. Por lo tanto, ya no servirá tenerlos listos a diciembre, como era hasta ahora. Los auditores deberán hacer una actualización a partir del próximo mes, la que demorará unos 30 a 45 días. Eso no se completaría hasta mediados de mayo, a lo que se suman los plazos legales para la citación. Por ello, se vislumbra que la junta se retrasaría para junio, en el mejor de los casos.
Aunque no quieren contemplarlo por ahora, existe la posibilidad de que la operación no cierre hasta el año próximo.