La receta del ministro Alberto Arenas para reactivar la economía puede que no les guste a los neoliberales, pero es ortodoxa y parece estár funcionando.
Banco Central informó ayer que el crecimiento en el cuarto trimestre de 2014 fue el más alto en más de un año y en gran medida se debió al gasto público.
La economía se expandió 1,8% en los últimos tres meses del año pasado, ratificando el momentum generado por las políticas contracíclicas del Ministerio de Hacienda. Comparado con el trimestre previo, el incremento fue 0,8%.
El crecimiento del PIB 2014 se revisó al alza hasta 1,9%, pero igual fue la cifra más baja anotada en los últimos cinco años y se enmarcó en un ciclo de desaceleración de la actividad económica, explicada por los bajos precios del cobre, la principal exportación del país, consecuencia, a su vez, de la debilidad de las principales economías del mundo y de los países emergentes, según los expertos.
BBVA dice que se observa una "aceleración en la velocidad del crecimiento principalmente durante la segunda parte del año pasado, lo que continúa observándose a inicios de 2015". El Imacec de enero se revisó al alza desde 2,7% a 3,0%, y para los economistas del banco eso apunta a un crecimiento trimestral anualizado en torno a 5%.
El consenso de los economistas es que la fuerte caída en la inversión privada y la demanda fue compensada por una alta dependencia del gasto público. La inversión cayó 6,1%, en particular en equipos destinados a la industria y minería.
Santander destaca que el consumo público aumentó el doble del privado. "No es la receta preferida de Chicago, pero es ortodoxa y está funcionando como la teoría de Keynes dice que debería funcionar", explica un destacado economista de MIT y con vínculos en el actual gobierno.
Los recortes de tasas del Banco Central también fueron un factor en el repunte del crecimiento, sin embargo, el presidente del ente emisor, Rodrigo Vergara. advirtió esta semana que no hay más espacio para nuevas rebajas, dado el escenario inflacionario.
El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, destacó que las expectativas económicas se han ido corrigiendo al alza y anticipó que el país puede llegar a crecer sobre un 3,0 % en 2015.
"Todas las estimaciones de crecimiento habían estado corrigiéndose a la baja y ahora se ha instalado la percepción de que la economía el 2015 va a crecer en torno a un 3,0 % y, si sigue esta incipiente recuperación, podría ser superior al 3,0 %", afirmó el responsable de las finanzas públicas chilenas.