El proceso creativo desarrollado por Paula Rivera y Javier Canales consideró el aporte de científicos del Parque Etnobotánico Omora, para recopilar registros, material y antecedentes sobre la variedad de nidos que conforman los bosques de la provincia de Cabo de Hornos.
“El Secreto del Origen” es el nombre de la instalación que la artista visual Paula Rivera y el escultor Javier Canales presentan por primera vez en Santiago, desde el jueves 7 de junio, en la Sala de Exposiciones del Centro Cultural Estación Mapocho.
La muestra, proyecto Fondart Regional 2011, cuenta con el financiamiento del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, a través del formato Ventanilla Abierta para su presentación en Santiago, en el marco de la segunda versión en la capital del Festival Cielos del Infinito.
La obra de carácter gratuita podrá ser visitada en la Sala de Exposiciones del Centro Cultural Estación Mapocho, primer nivel central sur, hasta el domingo 7 de julio, de 11:00 a 14:00 y de 15:00 a 20:00 horas.
Luego de itinerar por Puerto Williams y Punta Arenas, la instalación EL SECRETO DEL ORIGEN llega por primera vez a la capital, en el marco de la segunda versión del Festival Cielos del Infinito en Santiago.
La muestra incluye una serie de grandes volúmenes que la artista visual Paula Rivera tejió utilizando el junco como materia prima, planta usada por los pueblos originarios australes para elaborar diferentes tejidos. Junto a eso, el público podrá apreciar veintidós piezas de cerámica esmaltada en la técnica Raku, realizadas por el escultor Javier Canales.
Utilizando el concepto de hogar como refugio, tomando como referente a los nidos como lugar de resguardo utilizado por los animales para procrear y criar, los artistas crean la metáfora vinculada a la propia existencia y vida personal, familiar, social y universal, con el fin de crear conciencia sobre las infinitas posibilidades de creación de nuestro ecosistema.
El Secreto del Origen incluye fotografías de diversos refugios y cajas de metal con elementos naturales, cerámica y plata. Además de un registro en video que recoge las principales motivaciones del equipo artístico y científico, para realizar este proyecto que rescata el naturalismo y lenguaje ancestral, combinándolo en la metáfora de lo que podemos entender hoy ecosistema. Los nidos de las aves en su multiplicidad de formas y lugares en los que son construidos, han alimentado el imaginario de los seres humanos para transmitir, como una metáfora de la propia vida, el lugar del refugio.
El proceso creativo desarrollado por Paula Rivera y Javier Canales consideró el aporte de científicos del Parque Etnobotánico Omora, para recopilar registros, material y antecedentes sobre la variedad de nidos que conforman los bosques de la provincia de Cabo de Hornos.