El máximo responsable ejecutivo de Facebook Inc., Mark Zuckerberg, se presentó ayer en la sede de la red social (puedes ver el video aquí), en lo que constituyó su primera sesión pública de preguntas y respuestas y dijo que esperaba aprender de las cosas que preguntaba la gente.
Facebook obligó este año a los usuarios que querían utilizar su producto de mensajes a bajar para ello una aplicación aparte, lo que hizo surgir cuestionamientos de privacidad en relación con las autorizaciones de la aplicación. La primera pregunta, entonces, fue por qué Facebook obligó a todos a hacerlo. Zuckerberg estaba preparado.
Los mensajes son “algo que la gente usa mucho más que la actividad de redes sociales en sí”, dijo. Habría demasiada “fricción” si la gente tuviera que dedicar segundos preciosos haciendo clics para mensajes en la aplicación principal de Facebook.
“Teníamos que crear una experiencia más concentrada”, dijo.
Zuckerberg admitió que Facebook tiene que esforzarse para conquistar la confianza de los usuarios del Messenger luego de que las condiciones de servicio de la compañía fueran blanco de críticas por exigir demasiado.
“Tal vez no lo manejamos todo lo bien que habríamos podido”, dijo.
Esa película
Cuando le preguntaron si la película “La red social”, de 2010, reflejaba cómo había empezado la compañía, contestó que el film dramatizaba en exceso lo que había pasado y que no conoció a los guionistas. Agregó que había visto sólo una vez “al hombre que me interpretó en la película”, el actor Jesse Eisenberg.
“Traté de ser amable”, dijo Zuckerberg.
A la pregunta de por qué siempre usa la misma camiseta gris, respondió: “Si pierdo tiempo en cosas tontas o frívolas, siento que no estoy haciendo mi trabajo”.
Además, también otros lo han hecho. El fundador de Apple, Steve Jobs, tenía un uniforme consistente en un suéter negro de cuello alto.
“No creo que el presidente Obama elija lo que se pone cada día”, dijo Zuckerberg.
Quiere que Facebook sea “la escuela de la próxima generación de emprendedores”. Afirmó que se siente “muy orgulloso cuando se van y luego fundan una compañía en otra parte”.
Cuando se trasladó a Silicon Valley hace alrededor de 10 años no pensaba que Facebook se convertiría en uno de los grandes nombres de la tecnología.
“No quería crear una empresa y no sabía nada sobre crear empresas”, dijo. “Lo que pensaba era: ‘Algún día voy a crear algo que va a ser una empresa’”.