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La comisión mixta aprobó esta madrugada 18 escaños reservados para los pueblos originarios en la Convención Constitucional. La fórmula fue votada por la oposición y rechazada por el oficialismo, en una maratónica jornada, que fue suspendida varias veces. El senador DC Francisco Huenchumilla advirtió que con la fórmula de 15 escaños, planteada por el oficialismo, “el Estado les cierra las puertas a los pueblos originarios y no aprende de la historia”. Por lo visto, la falta de acuerdo sobre el número de escaños, 15 o 18, sigue siendo la piedra de tope. Pero finalmente será la Sala de la Cámara de Diputados y Diputadas la que debiera ratificar, el jueves por la mañana, los cupos para los representantes indígenas, mientras que el mismo jueves por la tarde lo debiera hacer la Sala del Senado. El número de los 18 escaños no dejó satisfechas a las comunidades indígenas, pues quedarían subrepresentadas, aseguran. Crítica con todo el arco político se mostró la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y Pueblos Originarios de la Cámara, Emilia Nuyado, quien calificó como “decepcionante» el accionar de los parlamentarios de la oposición en este tema.
Con gran molestia reaccionó hoy la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y Pueblos Originarios, Emilia Nuyado, a la propuesta que finalmente terminó de votarse esta madrugada y que fijó en 18 escaños reservados para las comunidades indígenas, aprobada por seis miembros de la oposición y rechazada por cuatro parlamentarios oficialistas.
A juicio de la diputada, el Estado de Chile tuvo la gran oportunidad de resarcir la deuda histórica hacia los pueblos originarios, entregándole la posibilidad real de participación para escribir la Carta Fundamental. “Sin embargo, aquí primó la herencia transversal de la derecha, la izquierda y del centro de tener actitudes discriminatorias, clasistas y racistas hacia los pueblos originarios”, sostuvo Nuyado en conversación con El Mostrador.
“Yo esperaba una oposición más empoderada del trato y de los vínculos que ha tenido con los pueblos indígenas, a diferencia de un Gobierno que desde que se comenzó a discutir los escaños reservados para los pueblos indígenas, siempre tuvo la negativa de incorporarlos”, criticó la diputada.
El debate que comenzó a las 18 horas del lunes se extendió hasta altas horas de la madrugada y fue interrumpido un par de veces por los legisladores oficialistas que, al ver que no había acuerdo, salían de la comisión, mientras los senadores y diputados de la oposición regañaban por el tiempo perdido. El enfado fue subiendo de tono, por lo que se convocó nuevamente a la comisión mixta para que votaran y el resultado dio paso a una fórmula, cuyo futuro es incierto y que debería votarse en la Sala de la Cámara de Diputados y Diputadas por la mañana, y en la Sala del Senado por la tarde.
Nueve escaños supernumerarios y otros nueve dentro de los 155 convencionales constituyentes que redactarán la nueva Constitución fue la fórmula aprobada por la oposición y rechazada por el oficialismo. En esta maratónica jornada, las recriminaciones entre ambos sectores no cesaron en ningún momento, y dejaron en evidencia la incapacidad de legislar sobre un tema tan relevante como es la participación de los pueblos originarios, históricamente excluidos de las grandes decisiones del país.
El senador DC Francisco Huenchumilla advirtió que con la fórmula de 15 escaños planteada por el oficialismo, “el Estado le cierra las puertas a los pueblos originarios y no aprende de la historia” .
La tensión era altísima entre los miembros de la comisión, pues no había avance sobre el guarismo, ni tampoco respecto de si estos escaños serían parte de los 155 de la Convención Constitucional o serían supranumerales.
Antes, eso sí, votaron por la creación de un padrón indígena que se confeccionará sobre la base de los antecedentes disponibles en el Estado, tales como la solicitud de calidad indígena en la Conadi; la nómina de apellidos indígenas del mismo organismo; la nómina de apellidos indígenas de postulantes a becas indígenas desde el año 1933; el registro de socios de comunidades y asociaciones indígenas jurídicas de la Conadi, ente otras.
Sin embargo, los legisladores dejaron fuera la posibilidad de la autoidentificación con las comunidades indígenas, trámite que se había pensado que podía ocurrir en el momento de votar, a través de una simple declaración de la persona ante el Servel.
Este punto es fuertemente cuestionado por la diputada Emilia Nuyado, pues –argumenta– “no primó la autoidentificación, sino un registro que limitará a las personas que no hayan sacado su calidad de indígena. Desafortunadamente, terminó limitando la posibilidad de la autoidentificación, llevándola a un registro que en estos tiempos será difícil construir, pues estamos contra el tiempo”.
Por lo demás –agrega–, “si alguien quisiera autoidentificarse deberá ser 40 días antes y no queda claro quién lo va a recepcionar: la Conadi, el Servel o el municipio».
Nuyado lamentó la votación y señaló que “es decepcionante que la fórmula la haya aprobado la oposición. Nuestros parlamentarios tienen un gran responsabilidad, pues aprobaron lo que la derecha le había dicho que hicieran, pero más encima el oficialismo luego se da el lujo de rechazar. No los entiendo”.
No existe claridad de lo que ocurrirá cuando de vote en la Sala del Senado, e incluso la senadora Luz Ebensperger hizo reserva de constitucionalidad.
