Los diputados Daniel Melo (PS), Camila Musante (AD) y Tomas Hirsch (AH) ingresaron esta semana al Poder Judicial los respectivos escritos, haciéndose parte de la demanda de nulidad de un convenio entre la empresa Aguas Andinas y la empresa AES Gener (hoy AES Andes), por el uso de fuentes de agua potable de Santiago para la generación eléctrica de las centrales hidroeléctricas Alto Maipo.
Diputados se sumaron a la demanda interpuesta por organizaciones ambientalistas en contra de la sanitaria Aguas Andinas y la empresa AES Gener (hoy AES Andes), controladora del proyecto hidroeléctrico Alto Maipo que según los demandantes pone en riesgo el abastecimiento de agua potable para la capital chilena.
La acción judicial, presentada en 2019, busca anular un contrato celebrado entre ambas compañías que establece el vertimiento y conducción de agua por parte de la sanitaria hacia operaciones del proyecto energético, hecho que «se aleja del objeto único establecido por ley» (producción de agua potable) y «constituye un negocio paralelo».
«Debemos comprender que el avance del proyecto Alto Maipo pone en juego el suministro de agua potable para toda la Región Metropolitana. Es decir, la vida de millones de personas se pone en riesgo, una vez más, solo para proteger los intereses oligárquicos, que creen estar por sobre la ley», señaló la diputada electa de Apruebo Dignidad, Camila Musante.
«Me hago parte de esta demanda porque urge proteger la cuenca de un río que está por desaparecer, porque ninguna persona, empresa o grupo de empresas pueden estar por sobre el derecho y porque defender la tierra y el agua, es defender nuestra propia existencia», agregó.
«Consideramos inaceptable que, una vez más, se prioricen negocios entre grandes grupos económicos por sobre las necesidades básicas de las familias de la Región Metropolitana y del país. Aguas Andinas tiene la obligación de utilizar el agua que recibe única y exclusivamente para proveerla a los habitantes de la región», afirmó por su parte el diputado del Partido Humanista, Tomas Hirsch.
«Esperamos que sea acogido nuestro escrito y que nunca más se utilice el agua destinada para consumo humano en otras actividades por parte de la empresa encargada del servicio», sentenció el parlamentario.
El diputado socialista Daniel Melo, también parte de la demanda de nulidad, expreso que «estamos ante un caso sin precedentes donde se pretende utilizar un bien tan escaso y que debemos proteger como es el agua potable de la Región Metropolitana, para fines que no es el consumo humano, sino de un proyecto hidroeléctrico del cual he sido y soy muy crítico».
El 2021 cerró con el récord de ser el cuarto año más seco en Chile desde que se tienen registros, una situación que es especialmente crítica en la zona central, donde miles de habitantes reciben agua diariamente gracias a camiones aljibes.
La sequía, que suma ya 13 años consecutivos, es considerada como una consecuencia de la crisis climática, pero las organizaciones ecologistas denuncian que el modelo de gestión de agua chileno -cuyo origen se remonta a la economía neoliberal instaurada durante la dictadura- la ha agravado, mientras el Código de Aguas ya se discute en la Convención Constitucional.
Cabe mencionar que Alto Maipo, por un plan de cumplimiento ante la Superintendencia del Medio Ambiente, tuvo que solicitar una revisión a su RCA para ver cómo había modificado una variable ambiental asociada a cuerpos de aguas. Ese procedimiento pese a haber concluido lo que procede es la revisión de los recursos de reclamación.
Además es una de las iniciativas que deben ser sometidas a evaluación del Comité de Ministros y que, según consignó una nota de La Tercera, el gobierno del Presidente Sebastián Piñera definió como uno de los proyecto de inversión prioritarios para la delegación ministerial liderada por el Ministerio del Medio Ambiente, antes del 11 de marzo; cuando asuma la nueva administración del electo Mandatario Gabriel Boric.
Alto Maipo logró completar con éxito la sincronización de una segunda Unidad al Sistema Eléctrico Nacional, al inyectar por primera vez generación renovable de la unidad 1 de la central Las Lajas. La operación comercial del proyecto está planificada para finales de marzo de 2022.
El proyecto pertenecientes a AES Gener (AES Andes desde agosto de 2021) y cuya sociedad anónima en su totalidad está en poder de Inversiones Cachagua Ltda (91,3%)— está sujeto a revisión de su Resolución de Calificación Ambiental (RCA) en línea con lo dispuesto por el artículo 25 quinquies de la Ley 19.300.
Aunque en un comienzo en el proyecto participó el Grupo Luksic, en 2017 vendió el 40% que tenía en Alto Maipo a través de la minera Los Pelambres.
Según detalló Pulso en octubre de 2021, la iniciativa se salió de control presupuestario hace muchos años. Su inversión total asciende a US$ 3.500 millones, pero la estimación inicial era de US$ 2.050 millones. Hasta ahora, AES Andes destinará, reportó a fines de agosto, US$ 1.018 millones de inversión.
Hace unos días el gobernador de la Región Metropolitana Claudio Orrego (DC) hizo un llamado a las autoridades, empresas y ciudadanos sobre la crisis hídrica por la que atraviesa el país, dando a conocer que no puede ser descartado un posible racionamiento de agua potable en la zona.
Por medio de su cuenta de Twitter, el gobernador escribió que “en medio de esta mega sequía y el cambio climático no podemos descartar racionamiento de agua para RM este año”. A esto agregó que “el llamado es transversal: personas, organizaciones, empresas y Estado debemos cuidar un recurso tan valioso y escaso como el agua”.
Aguas Andinas y el proyecto hidroeléctrico de pasada Alto Maipo firmaron, en 2011, un convenio que tiene como objetivo evitar que la puesta en marcha de la hidroeléctrica condicione la operación del embalse El Yeso y, en consecuencia, el abastecimiento de agua presente o futuro de la ciudad de Santiago. Según señala el sitio web de la compañía, «este acuerdo busca priorizar el consumo humano en Santiago, por sobre otros usos».
«El Convenio regula la relación entre los derechos de agua que tienen AES Andes y Aguas Andinas. Los primeros de carácter no consuntivos (generación hidroeléctrica) y los segundos consuntivos (consumo humano)». También se declara que el proyecto hidroeléctrico Alto Maipo «no pertenece a Aguas Andinas, ni ha recibido derechos de agua por parte de la empresa».
Y recalcan que en el acuerdo se dejó establecido que el manejo del caudal del Embalse El Yeso será de exclusiva responsabilidad de Aguas Andinas, «el cual será siempre operado de acuerdo con los requerimientos de producción de agua potable que tenga la ciudad».
Cabe destacar que el proyecto hidroeléctrico considera distintas centrales y puntos de captación, entre las que se encuentra la ubicada a los pies del Embalse El Yeso.