Ante el hallazgo de casos positivos de gripe aviar, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) entregó indicaciones preventivas y de control, especialmente para los más de 15.000 avicultores que trabajan con INDAP en todo Chile. El SAG enfatiza que la primera medida es no manipular las aves con síntomas o muertas y avisar de inmediato a su oficina más cercana o incluso a través de un teléfono de emergencia.
Qué hacer ante la presencia de aves con síntomas de estar enfermas con influenza (gripe) aviar, qué hacer ante aves muertas y qué medidas de protección asumir para evitar el contagio de otras aves en el predio, es parte del set de recomendaciones que entrega el Servicio Agrícola y Ganadero –SAG ante la confirmación de casos positivos de alta patogenicidad en el norte de Chile.
El Ministerio de Agricultura a través del servicio, hasta la fecha de edición de este artículo ha confirmado casos positivos con la enfermedad progresivamente en cada región desde Arica y Parinacota (detectado el pasado 5 de diciembre) hasta Coquimbo (confirmado la tarde de este jueves 29). Todos corresponden a aves silvestres y particularmente pelícanos.
INDAP trabaja actualmente con 12.000 avicultores y avicultoras del Programa de Desarrollo Territorial (Prodesal), 3.500 a través del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) y 100 que hoy son parte del Servicio de Asesoría Técnica (SAT). Los fines de esta producción son diversos: comercial, autoconsumo, venta de huevos, carne u otros fines.
INDAP invita a productores y productoras de la agricultura familiar campesina a tomar atención con estas acciones también dirigidas a quienes trabajen, se relacionen o realicen actividades en que se observe fauna silvestre, ya sea en campo o en centros de rescate o rehabilitación.
La influenza aviar (IA), también conocida como gripe aviar, es una enfermedad viral, muy contagiosa, que afecta a las aves domésticas como a las silvestres sin posibilidad de cura. En forma eventual puede transmitirse a otras especies, entre ellas el hombre.
Esta enfermedad compleja ocurre en todo el mundo, pero con diferentes subtipos que son más o menos frecuentes según las regiones del planeta y se pueden clasificar en categoría de Baja Patogenicidad (IABP), que causa pocos o ningún signo clínico, y Alta Patogenicidad (IAAP), que signos clínicos graves y, potencialmente, altos índices de mortalidad.
Entre los síntomas que las aves pueden presentar están: Falta de apetito y descoordinación en sus movimientos. Plumaje erizado. Respiración dificultosa, secreciones nasales. Diarrea. Hinchazón de cabeza y color azulado de cresta, barbillas y patas. Postración y muerte.