CULTURA
Un proyecto en el Congreso, que data de 2017, es considerado clave por ambientalistas para enfrentar el cambio climático. Mientras los funcionarios del servicio acusan a los directivos de falta de diálogo para incidir en la iniciativa legal, desde la dirección ejecutiva de la entidad aseguran que “se han generado diversas instancias con los sindicatos y con sus representantes, a fin de socializar, informar y difundir el contenido del proyecto de ley, además de solicitar observaciones y propuestas de indicaciones a los representantes de los trabajadores”.
La organización ambientalista WWF Chile ha advertido sobre la urgencia de contar con un Servicio Nacional Forestal (Sernafor) para enfrentar impactos de la crisis climática y de pérdida de biodiversidad.
En el Congreso se encuentra un proyecto desde 2017, el que apunta a reemplazar a la Corporación Nacional Forestal (Conaf), creada en 1970, bajo el Gobierno de Eduardo Frei Montalva.
Actualmente, Conaf es una corporación de derecho privado, lo que le impide tener nuevas funciones y atribuciones, según lo ha indicado el Tribunal Constitucional (TC) y la Contraloría General de la República (CGR), informan desde su dirección ejecutiva.
Agregan que, al pasar a ser un servicio público, se le podrán entregar por ley más funciones públicas, sin que se pueda objetar su ejercicio en dicho ámbito. Un ejemplo de esto es que el nuevo servicio podrá presentar proyectos de ley en materias de su competencia, lo que actualmente Conaf está impedida de hacer.
Sin embargo, la llegada de la nueva institucionalidad además conflictúa a los funcionarios de Corporación Nacional Forestal, que acusaron a la dirección del organismo de falta de diálogo en torno al proyecto, y temen por su futuro laboral.
En la actualidad, las olas de calor e incendios forestales que se registran por estos días en el hemisferio norte y el recuerdo aún latente de las graves inundaciones y aludes con que se inició este invierno en la zona centro sur de Chile, son solo algunos elementos que hablan de la amenaza de fenómenos climáticos extremos.
Así lo enfatizaron desde la organización de conservación WWF Chile, para indicar que, tras la esperada aprobación de la Ley por la Naturaleza, que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), aún existen pendientes en materia de institucionalidad. En este caso, en lo relativo al bosque, los paisajes forestales, sus comunidades y la generación de resiliencia frente a los impactos climáticos.
“La creación de un Servicio Nacional Forestal (Sernafor), cuyo proyecto actualmente se tramita en el Congreso, ha sido solicitada con urgencia por diversos actores del sector y organizaciones, entre ellas, WWF, particularmente a partir de los devastadores incendios de 2017”, señala Rodrigo Catalán, director de Conservación de WWF Chile.
Actualmente la Dirección Ejecutiva de Conaf y el Ministerio de Agricultura son los que lideran este proyecto de ley.
“Se ha llevado a cabo un arduo trabajo, liderado por el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, por construir de forma responsable, armónica y propositiva el proyecto de ley, en el que, junto al equipo de Conaf, se elaboraron los aspectos técnicos del proyecto, por lo que el ingreso de las indicaciones y la reactivación de la tramitación legislativa serán un aporte para el sector y el debate público”, dice Christian Little, director ejecutivo de Corporación Nacional Forestal.
“Existe un apoyo transversal del sector forestal y ambiental para la transformación de Conaf en un servicio público, así lo ha planteado el Consejo de Política Forestal, por ejemplo. Esta es una demanda histórica que nace en los años 80 y que encuentra fundamento legal en el mandato de la Ley 20.417 que crea la institucionalidad ambiental, en el año 2010, la cual mandata a que Conaf se transforme en un servicio público”, agrega Little.
Según detalla Catalán, contar con el Sernafor es necesario, primero, porque actualmente existe una importante fragmentación de la institucionalidad forestal que resta eficiencia y eficacia a su accionar, donde hay desafíos país que requieren ser destrabados.
Entre ellos, se cuenta la restauración de bosques, que es una de las llamadas Soluciones Basadas en la Naturaleza que permiten enfrentar de mejor modo las crisis climática y de pérdida de biodiversidad. Segundo, si bien existe regulación, se requiere fortalecer la capacidad de darle cumplimiento, robusteciendo aspectos como la fiscalización, a juicio de WWF.
A lo anterior se suma el creciente riesgo de incendios forestales cada vez más destructivos, a la luz de la alta vulnerabilidad de nuestro país a los impactos del cambio climático, así como la deficiente planificación territorial sobre la que se ha desarrollado el modelo forestal chileno.
“Junto con el SBAP, el Sernafor es clave para avanzar en el manejo sustentable y en la conservación y restauración del bosque nativo, así como en tareas donde hoy los resultados esperados se ven lejanos, como es el caso de la restauración de bosques. Creemos que este es un punto crítico, ya que el país comprometió restaurar un millón de hectáreas de paisajes al 2030 en sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC), en el marco del Acuerdo de París contra el cambio climático”, agrega Catalán.
A la catastrófica temporada de incendios forestales de 2017 le han seguido otras igual o aún más cruentas, como la del último verano. En dicho periodo fueron afectadas 450 mil hectáreas, con 26 víctimas fatales, cerca de ocho mil damnificados, daños en 45 servicios de agua potable rural (APR) y pérdida de casi 31 mil animales de crianza.
“El cambio climático hará estos desastres más recurrentes y destructivos. Por tanto, a la luz de la evidencia científica y sus advertencias, así como también de las propias vivencias de una parte importante de la población de Chile, enfrentada a impactos como la sequía y también devastadores incendios y destructivas inundaciones, está claro que la institucionalidad forestal debe ser fortalecida. No solo a causa de los estragos producidos por desastres socioambientales, sino que también para impulsar de mejor forma el cumplimiento de desafíos como la restauración de bosques y también el desarrollo de mayores oportunidades para las comunidades a nivel local”, puntualiza el representante de WWF Chile.
En este contexto es que el Sindicato de Profesionales de la Corporación Nacional Forestal (Sinaprof-Conaf) habla de “escenarios determinantes”.
“En este contexto, cumplen un rol fundamental las y los trabajadores de la Corporación, quienes históricamente han luchado por su progreso y preservación por más de 50 años, por lo cual es clave que se les permita realizar las respectivas contribuciones y aportes en esta etapa de discusión del proyecto de ley”, señalaron los trabajadores en un comunicado público, donde pidieron un diálogo “abierto, transparente y honesto” en torno a la iniciativa.
A mediados de julio, el sindicato acusó a la dirección ejecutiva de Conaf –que “debiera promover y organizar estos espacios de diálogo”– de obstaculizar “todas y cada una de las instancias de participación y diálogo en este importante proyecto de ley”, junto con expresar temores por el futuro laboral de los funcionarios.
“Finalmente, después de casi dos meses de pretextos y evasivas por parte del señor Christian Little, se realiza una reunión virtual el día del 18 de julio de 2023 entre el director y sus asesores y la directiva del Sindicato Nacional de Profesionales de Conaf (Sinaprof), la abogada de Sinaprof Francisca Simpson Queirolo”, agrega la organización sindical.
“En esta reunión, Christian Little, se comprometió a remitir las indicaciones elaboradas por sus asesores, donde supuestamente, habría una indicación referente a lo que como sindicato hemos solicitado insistentemente, esto es, que el traspaso de los trabajadores sea hecho por el solo ministerio de la Ley y no por Decreto Presidencial, dado que, si se realiza de esta última manera, dicho traspaso sería anual, disimulando una contrata encubierta”, señalan desde Sinaprof.
Acto seguido, acusaron, tanto al director ejecutivo como a sus asesores de no remitir la información prometida. “¡Basta de despotismo! ¡Es suficiente! No queremos una dirección avasalladora”, subrayan.
Las presiones dieron resultado y, así, distintas dirigencias de trabajadores de Conaf lograron quince días extra para revisar el polémico proyecto de ley.
La mañana del martes 1 de agosto, en dependencias del Ministerio de Agricultura, los sindicatos de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) agrupados en el Sindicato Nacional de Profesionales (Sinaprof); Sindicato Nacional de Trabajadores de Conaf (Sitrem); Federación de Sindicatos de Conaf (Fenasic); y el Sindicato de Trabajadores de Valparaíso, se dieron cita para una reunión ampliada con el ministro de la cartera, Esteban Valenzuela, y el propio Little. En la oportunidad estuvieron presentes de forma telemática todo el resto de dirigentes y representantes de los trabajadores de Conaf.
La actividad mostró una unidad de los diversos sindicatos y claridad en sus planteamientos, cuestionando unánimemente el proyecto de ley Sernafor o Serconaf pública. Para las entidades sindicales, esta iniciativa de ley tiene serias falencias y fallas, al tiempo que acusan que está siendo trabajada entre cuatro paredes sin considerar la opinión de los trabajadores. Sinaprof, a través de su presidente, Ricardo Heinsohn, advirtió que “el director ejecutivo de la entidad ya no es un interlocutor válido, puesto que se ha avanzado sin considerar a las otras partes involucradas en este proceso”.
Los sindicalistas señalan que este nuevo servicio no considera una real fiscalización que, como servicio, debe ser garantizada para todos y todas.
“Salvo en la letra H artículo 4 que sale mencionada esta palabra fiscalización, pero no desarrolla ningún sistema eficaz o efectivo con potestad sancionatoria, es decir, las platas se van a ir a los municipios y eso no corresponde”, afirmó Heinsohn.
Luego de una larga exposición donde cada parte entregó sus puntos de vista sobre el polémico proyecto de ley, los sindicatos lograron que el ministro Valenzuela no ponga urgencia al mismo, continuando con urgencia simple, para poder trabajar las indicaciones en conjunto con los trabajadores, a efectos de mejorarlas antes de que sea Ley de la República.
“Dentro de Conaf se ha trabajado como una verdadera dictadura por parte de la dirección ejecutiva. Existen muchas dudas y miedos, la gente está perdiendo la paciencia y se está pensando en tomar medidas de fuerza en caso de que todo esto termine siendo una simple declaración de buenas intenciones. Se ha estado trabajando a espaldas de los trabajadores. Insisten en sacarlo este año y, no sé por qué, será una caja pagadora de favores políticos o qué se yo”, declaró el presidente de Sinaprof.
Desde Conaf reconocen que el Estado requiere aumentar su compromiso con el manejo y la restauración de los ecosistemas boscosos y xerofíticos, tanto de bosques nativos como en plantaciones.
“Esto es esencial para fomentar la gestión sostenible de los ecosistemas naturales y asegurar su protección en el largo plazo. Sin embargo, en la actualidad, existe una carencia de una normativa actualizada en este ámbito”, señaló el propio Little.
Su director ejecutivo asegura que “como Gobierno estamos tomando medidas para avanzar en una transición ecológica justa, lo cual se ha expresado como un objetivo prioritario desde Conaf y del ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela”.
Una de las áreas clave en esta transformación es el manejo y prevención de incendios, así como la recuperación de áreas afectadas por los mismos. Estos desastres tienen un impacto devastador en las personas y en la naturaleza. Además de avanzar en una aplicación efectiva de la Ley 20.283 de Bosque Nativo.
Un ejemplo de transformación es la reciente aprobación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), lo que constituye un gran avance en la institucionalidad ambiental de la cual Conaf es parte fundamental en áreas asociadas a la sustentabilidad.
Little recuerda que el programa de Gobierno del Presidente Gabriel Boric se enfoca en la transición ecológica justa.
“Para eso deben existir transformaciones y es lo que se está realizando con Conaf, de pasar de una corporación de derecho privado a la Conaf pública”, explica.
Añade que esto permite robustecer al Estado y fortalecer la protección ambiental y el desarrollo forestal, integrar una mirada ecosistémica, con un manejo sostenible de los recursos en un escenario de cambio climático y, por supuesto, entregar herramientas para manejar y conservar los bosques nativos en áreas fueras del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (Snaspe).
En cuanto a las gestiones en torno al proyecto de ley, Little puntualiza que, por una parte, Conaf ha trabajado en conjunto con el Ministerio de Agricultura, generando conversaciones con diversos sectores, como los ministerios del Medio Ambiente y del Interior, en un trabajo intersectorial y colaborativo, para revisar la iniciativa con una visión de país en términos de institucionalidad.
Por otra parte, desde Conaf se han hecho charlas informativas a los sindicatos, también se socializó en el Consejo de Política Forestal, se han realizado talleres a las direcciones regionales, entre otras instancias, a fin de comunicar los estados de avance del proyecto, así como el contenido de las indicaciones presentadas el 19 de julio del presente año, asegura.
Frente a las declaraciones de trabajadores de Conaf respecto a que la dirección ha obstaculizado las instancias de diálogo sobre el tema, Little insiste en que “se han generado diversas instancias con los sindicatos y con sus representantes, a fin de socializar, informar y difundir el contenido del proyecto de ley, además de solicitar observaciones y propuestas de indicaciones a los representantes de los trabajadores”.
“En este punto, me gustaría transmitir tranquilidad a los y las trabajadoras de Conaf, ya que todo el personal mantendrá los mismos derechos y condiciones contractuales al pasar a la Conaf pública, puesto que el proyecto señala que todo el personal deberá ser traspasado al nuevo servicio”, concluye.
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