Mientras Francisco Orrego tendrá que disminuir su estridencia e intentar una postura dialogante, Claudio Orrego deberá penetrar con temas de interés las comunas del sector oriente y Puente Alto.
En la carrera hacia el balotaje, los dos aspirantes a ganar el Gobierno Regional de Santiago, Claudio Orrego (Ind/ex-DC) y Francisco Orrego (RN), comienzan rápidamente a ajustar sus estrategias para captar la atención del electorado. “Pancho”, quien ha destacado por su estilo enérgico, estridente y provocador, planea moderar su enfoque y lucir sus habilidades blandas para propiciar el diálogo y apuntaría a votantes de comunas más populares. Mientras que el gobernador regional en ejercicio buscará captar adherentes en sectores del oriente de Santiago y Puente Alto, donde espera mejorar su apoyo.
Con el voto obligatorio, un 20% del electorado permanecía “indeciso” hasta la última semana de campaña electoral. La situación se complicó para el oficialismo tras la acusación contra el exsubsecretario Manuel Monsalve, que habría ayudado a la derrota de candidaturas como las de Irací Hassler en Santiago y Emilia Ríos en Ñuñoa, las que se interpretan en el bloque de Gobierno como un castigo a la administración Boric.
Por ello, en el Socialismo Democrático consideran que Claudio Orrego debe mantenerse alejado del PC y de los emblemas del Frente Amplio, como el “octubrismo”, los indultos, y lucir su condición de independiente para abordar al elector de la derecha moderada.
El ex-DC y exalcalde de Peñalolén, se reunió el lunes con representantes de diversas tendencias políticas, buscando proyectar el concepto del candidato de la transversalidad y apuntando a superar el antagonismo clásico entre derecha e izquierda. En su círculo, explican que comenzará a usar su nombre completo y que se le verá en actividades que no solo abarcan los temas de seguridad, sino otras, como el deporte, aprovechando su veta de “runner”, tan valorada en el ABC1.
Por su parte, el comentarista del show “Sin Filtro”, “Pancho” Orrego –quien logró 1.176.628 votos–, buscará consolidar su imagen como el candidato de la clase media, distanciándose del oficialismo y de su contendor, a quien asociará con el Frente Amplio y el Partido Comunista.
Asimismo, con el respaldo de la candidata del Partido Republicano, Macarena Santelices, su equipo confía en atraer a votantes de la derecha más conservadora, aunque ha expresado tener diferencias significativas con la candidata derrotada del partido de Kast.
Los analistas opositores coinciden en que Francisco debe trabajar en su credibilidad y alejarse de un tono polarizante. El “retador” superó al gobernador en ejercicio en ocho de las 52 comunas de la Región Metropolitana, destacando en Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea, con votaciones de 47,9%, 56,9% y 58%, respectivamente.
Los observadores de los partidos y de los centros de estudios sostienen que la batalla por la Región Metropolitana se perfila como un conflicto entre la moderación y la polarización, con el futuro de ambos candidatos dependiendo de su capacidad para conectar con un electorado diverso.
La segunda vuelta estará protagonizada por el interés de nuevos electores, obligados a participar, con un perfil despolitizado y desinformado, que deben optar entre dos candidatos con el mismo apellido, uno de apariencia moderada y otro disruptivo en redes sociales. Y donde, además, se considera que los nuevos votantes no están informados sobre las propuestas de los candidatos, lo que representa un desafío en la comunicación.
En la oposición sostienen que Claudio Orrego tiene la ventaja de “la experiencia y un enfoque moderado que se vio emerger en estos comicios”, lo que ayudaría a atraer votantes que no se sienten conectados con la política. Por otro lado, Francisco Orrego se presenta como un candidato disruptivo que viene de la TV underground, utilizando redes sociales, lo que puede atraer a algunos, pero alienar a otros.
“El bolsón electoral que deben conseguir probablemente esté dentro de los electores llamados obligados o nuevos electores que se incorporaron con el voto obligatorio. Este es un elector despolitizado, desinformado, que parece distante de la política y, por lo tanto, ahí van a tener que hacer esfuerzos los dos Orrego por tratar de entrar en esa base electoral. Claudio Orrego tiene a su ventaja el que tiene las competencias técnicas. El que es el actual gobernador y que es una figura más bien que apunta a un estilo moderado”, dice el académico de la Universidad Central, Marco Moreno.
“El otro Orrego, Francisco, es un estilo más bien confrontacional propio del estilo polarizante que impera en el territorio digital. De esta manera van a tener que llegar los dos a intentar pirquinear votos en ese mundo que hoy día está compuesto por estos nuevos electores, que es un volumen importante de ciudadanos que fueron obligados (…), que nunca estuvieron interesados y ahora van a tener que escuchar la oferta que hagan estos dos candidatos para poder intentar encontrar en ellos el apoyo que necesitan para ganar la elección”, señala Moreno.
Los votos de los Orrego en la reciente elección son su base para el balotaje. “Claudio”, dicen en la DC, debe convencer a votantes de derecha en Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea y Providencia, que prefieren su estilo ordenado frente al estridente de “Pancho”.
Francisco Orrego, en tanto, necesita movilizar a su partido y negociar con quienes no ganaron en la reciente elección, como Republicanos y Social Cristianos, para que formen parte de su futura administración. También debe convencer a los electores que apoyaron a candidatos perdedores y atraer a los jóvenes que votaron por Claudio, utilizando su estilo más juvenil y transgresor.
“Claudio debe focalizar energías en busca de convencer a quienes votaron nulo y a los votantes del sector oriente, que siendo votantes de derecha tradicionales, les hace mucho ruido el estilo beligerante del otro Orrego. Francisco Orrego, representante de Chile Vamos, debe movilizar sus estructuras partidarias, mediante negociación, con quienes son del sector de derecha y no ganaron en la reciente elección (Republicanos, Social Cristianos y otros), que en la futura dirección del Gobierno Regional , de ganar el Gobierno Regional, formarían parte de esa dirección”, evalúa el experto electoral Miguel Moreno (PR).
En Chile Vamos sostienen que su candidato se ha enfocando en consolidar su apoyo entre alcaldes y electores de comunas de derecha. “En ese sentido, corre con cierta ventaja al incluir en su campaña a dos de los grandes triunfadores y exabanderados presidenciales, Mario Desbordes y Sebastián Sichel”, señalan en el sector.
La cita con la alcaldesa Evelyn Matthei destaca la importancia de obtener el respaldo de figuras clave en el sector, lo que podría ser crucial para su campaña en el balotaje, pero la forma en que la abrazó no fue bien evaluada, “porque tuvo poca estética para un gobernador”, advierten en la oposición.