La cantante amaneció sin vida en su casa de Camden Town el 23 de julio de 2011. Su muerte causó una gran conmoción y truncó una prometedora carrera musical. Al principio se pensó en sus adicciones a la heroína y el crack como causa de fallecimiento. Pero el informe de la autopsia reveló que la cantante había muerto debido a un fallo respiratorio tras caer en coma etílico.