Un comerciante oriundo de Uganda llamado Mohammed Ssemanda se casó el mismo día con sus tres prometidas ya que no podía permitirse una boda para cada una por lo costoso que sería. Y, al parecer, sus esposas, Jameo Nakayiza, de 27 años, y su hermana Mastulah, de 24 años, y la primera mujer del flamante marido, Salmat Naluwugge, de 48 años y con quien ya tiene cinco hijos, estuvieron de acuerdo. «Le agradezco a nuestro esposo haberse casado con todas a la vez. Es una señal de que no discriminará a ninguna de nosotras», dijo Salmat. Uganda es uno de los pocos países que reconoce la poligamia.