Los muertos por las intensas lluvias que azotaron el este y el noreste de Sudáfrica en los últimos días ascienden a 51 personas, según actualizaron este martes fuentes oficiales locales.
El departamento de Gobierno Cooperativo y Asuntos Tradicionales de KwaZulu-Natal, la provincia oriental más afectada, informó de que esta noche se han encontrado nuevos cuerpos entre las ruinas y que las operaciones de rescate continúan para encontrar a cinco personas que siguen desaparecidas.
La encargada de este departamento, Nomusa Dube-Ncube, además dijo que hay centenares de personas desplazadas que necesitan asistencia, según informó el medio sudafricano Eyewitness News.
El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, ha acortado su visita oficial a Egipto y se encuentra visitando la región para «evaluar los daños».
«Acabó de llegar a casa y he volado a KwaZulu-Natal para evaluar los daños causados por las inundaciones y revisar los labores de rescate», informó el mandatario en su cuenta de Twitter a última hora del lunes.
Entre las zonas afectadas se encuentra el área de la ciudad costera de Durban (la tercera más poblada del país) que también ha sufrido fuertes inundaciones.
Se espera que comience a llegar ayuda a los afectados y a quienes se alojan en pabellones deportivos.
La lluvia dará una tregua a esta provincia sudafricana por la mañana, según el departamento meteorológico del país, pero se esperan nuevas precipitaciones por la tarde, que continuarán hasta el jueves.
Además, hay alerta de lluvias intensas en la provincia de Cabo Oriental (sureste) , lo que podría dejar nuevas inundaciones en las áreas costeras de Port Alfred, East London y Port St Johns.
Estos incidentes se unen al fallecimiento de otras 13 personas la noche del 18 de abril tras el desplome por un fuerte aguacero de una iglesia pentecostal en la localidad de Dlangubo, también ubicada en la región de KwaZulu-Natal, donde se celebraba un servicio nocturno.