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«No hay nada que celebrar»: marcha mapuche por el 12 de octubre finaliza con incidentes en el centro de Santiago

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Las portavoces de la movilización comentaron en una declaración a la prensa que la «marcha por la lucha mapuche», como se nombró a esta protesta, realmente es en repudio y por la resistencia.


Miles de miembros de la comunidad mapuche se manifestaron este sábado por el centro de Santiago para reivindicar la lucha y la resistencia indígena con motivo de la conmemoración del día 12 de octubre, una fecha en la destacaron que para ellos «no hay nada que celebrar».

Bajo los colores celeste, verde y rojo de las cientos de banderas mapuche que se ondearon en el centro de la capital, la comunidad recalcó que el 12 de octubre, el día que Europa celebra la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492, para los indígenas es un día de resistencia.

Belén Curamil, hija del lonko Alberto Curamil, actualmente preso en la cárcel de Temuco acusado de robo con porte de armas, leyó una carta que su padre y otros presos mapuche escribieron para la fecha.

«Hoy día reafirmamos que no hay nada que celebrar en estas fechas, sino que hay que visibilizar toda la resistencia que ha hecho la comunidad ante las acometidas de destrucción que están llevando a cabo las grandes empresas nacionales e internacionales en nuestro territorio», explicaba la misiva.

Alberto Curamil, recluido en el sur desde agosto, recibió en 2019 el Premio Ambiental Goldman, conocido como el «Nobel ambiental», por su lucha en la defensa de los territorios naturales de las comunidades mapuche en las regiones de La Aracaunía y Biobío.

Su hija explicó que en la carta, Curamil acusó a «inversiones capitalistas como las forestales y mineras» de mantener «el legado del colonialismo que antes ejercieron las naciones europeas».

«Invasiones que depredan nuestros ecosistemas y recursos naturales y sitios de significación cultural de nuestro pueblo amparados por una clase empresarial y política que no tiene interés cultural por nuestro pueblo, más allá que la ganancia económica desmedida, sin importar el daño», dijo Belén Curamil.

La comunidad mapuche se desplazó a lo largo de la avenida Bernardo O’Higgins, principal arteria de Santiago, al grito de «Liberar, liberar, al mapuche por luchar».

«La respuesta del Estado ante quienes denuncian y se oponen de manera directa a este sistema depredador es el hostigamiento, la persecución y el encarcelamiento con la finalidad de silenciarnos», indicó Belén Curamil.

Y agregó que a pesar de ello seguirán defendiendo los territorios que consideran sus tierras ancestrales y los recursos naturales que contienen.

Las portavoces de la movilización comentaron en una declaración a la prensa que la «marcha por la lucha mapuche», como se nombró a esta protesta, realmente es en repudio y por la resistencia.

También hubo momentos a lo largo de la manifestación para mandar apoyo a las comunidades indígenas del resto de la región, particularmente a las de Ecuador, que recientemente se unieron a las protestas sociales que se están desarrollando en Quito contra las medidas del presidente Lenín Moreno.

La manifestación en Santiago transcurrió en tono festivo, con música y reivindicaciones, con niños pequeños con sus padres, familias y ancianos.

Sin embargo, se registraron incidentes aislados a lo largo del recorrido protagonizados por grupos de encapuchados ajenos a la protesta que se enfrentaron a Carabineros presentes.

Video: @PiensaPrensa

Los propios miembros de la comunidad mapuche trataron de disuadir a los encapuchados y distanciarse de los destrozos que cometieron para que pudiera diferenciarse la protesta por la resistencia indígena de los disturbios esporádicos ocurridos.

En los últimos años el conflicto mapuche ha derivado en brotes de violencia en los que han muerto una veintena de personas, entre comuneros, policías y agricultores, mientras varias decenas de mapuche han sido procesados y condenados por diversos delitos.

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