Las historias cortas que componen “El papel pintado amarillo” (Ediciones Alpha Decay) son obras importantes de la literatura feminista y continúan resonando entre los lectores de hoy. La escritura de Gilman es singular y hermosa, con una característica pedagógica que nos permite comprender los desafíos de la mujer a principios del siglo XX. Una lectura obligada para cualquier persona interesada en la literatura feminista o la historia del tratamiento de la salud mental.