El diputado destacó en Al Pan Pan el problema de origen en la candidatura de Cubillos. Lejos de ser la revelación de su sueldo en la USS, sería la propia nominación que se saltó los mecanismos internos de Chile Vamos: “por eso llamó la atención la posición de Cubillos de imponerse a como de lugar”.
Los resultados de las elecciones municipales 2024 implican varios cambios en la correlación de fuerzas de los pactos electorales, en comparación con el desempeño de los partidos en los comicios de 2021.
En esta oportunidad, Chile Vamos sacó cuentas alegres con 122 alcaldes electos, obteniendo 35 municipalidades más que en 2021. Dentro del pacto, los independientes consiguieron una mayoría de 55 alcaldías, seguidos por Renovación Nacional con 38, la UDI con 22 y, finalmente, Evópoli con 6 comunas.
Sin embargo no todos fueron cuentas alegres en el conglomerado: en el sector resienten especialmente la pérdida de comunas emblemáticas. Tras 24 años de manejo de Renovación Nacional, Puente Alto se quedó en la izquierda (aunque no en el oficialismo) tras la victoria de Matías Toledo. Aún más, y tras ser durante meses la favorita a quedarse con el sillón edilicio, Marcela Cubillos Sigall perdió la carrera en Las Condes.
Hoy en Al Pan Pan, con Mirna Schindler: conversamos con el diputado de Renovación Nacional Frank Sauerbaum,con quien analizamos los resultados para el sector.
En particular el diputado sostiene que el error de Chile Vamos fue previo a la revelación del sueldo de la exministra de Educación en la Universidad San Sebastián. “El error se cometió por no haber sostenido al candidato oficial de Chile Vamos; antes esta marea que se produjo en su momento de apoyo a Marcela Cubillos, los partidos finalmente cedieron”, rememora el diputado la situación que llevó a la alcaldesa de Las Condes, Daniela Peñaloza, a desechar la reelección.
En esa línea Sauerbaum también ve como una mala señal a largo plazo el proceso que llevó a los resultados del domingo en Las Condes. “Nosotros tenemos una institucionalidad que hay que ocupar que hay que ocupar, los partidos para eso existen, justamente para ordenarse y para tener una participación ordenada en los comicios electorales, y aquí eso no se dio“, destacó, junto con agregar que “el procedimiento de los partidos estaba absolutamente definido y claro. Y por eso llamó la atención la posición de Cubillos de imponerse a como de lugar”.
De todas maneras también puso énfasis que en Cubillos hubiera logrado una buena gestión comunal de haber ganado en los comicios. “Pero acá el problema se produjo antes de incluso el escándalo por los $17 millones de la Universidad San Sebastián”.
En la otra cara de la moneda, el diputado identificó la victoria de Mario Desbordes en Santiago como un resultado, por un lado, del discurso del alcalde electo, mientras que por el otro la gestión de Irací Hassler en la comuna minó sus posibilidades de reeelección.
“Santiago está hecho realmente un asco: hay comercio ambulante, locales cerrados, el comercio está absolutamente deprimido, está rayado todo el centro. El centro cívico de la capital está muy deteriorado y la gente así lo vio”, señaló Sauerbaum.
Aquello, conjugado con la postura de Desbordes (“fue carabinero, fue parlamentario, fue ministro y representa el orden, la seguridad, un concepto totalmente distinto de lo que representaba la alcaldesa Hassler), le terminó dando la victoria al candidato de RN.
Algo que tiene fe logre concretar durante su mandato, pese a las altas expectativas que hay por instaurar un mayor orden en la comuna: “hay que dar señales más contundentes respecto de la respuesta en contra del crimen organizado (…) El hecho de que Mario Desbordes dé instrucciones claras respecto del combate al comercio ilegal, de que se fiscalice al comercio ambulante, de que hayan más rondas de carabineros… todas esas son pequeñas señalas que generalmente van mejorando la calidad del día a día de los santiaguinos”.
En esa línea, destacó el buen resultado electoral de su partido y lo diferenció de lo logrado por Republicanos, partido que pese a obtener un buen resultado en los comicios (incluso obteniendo el mejor rendimiento en consejeros regionales), no alcanzó la marea de votos que se anunciaba entre los analistas.
“Republicanos trató permanentemente de hablarle a su nicho, y ese nicho fue disminuyendo como vemos en los resultados. La política tiene que tener una vocación de mayoría para poder gobernar, para poder hacer los cambios que se requieren”, analizó, a la vez que destacó que los partidos de Chile Vamos no deben tener miedo “de hablar de los grandes cambios estructurales que nosotros creemos que tenemos que hacer, y lo tenemos que decir ahora”.
“La gente tiene que saber cuál es el programa de Gobierno que la centroderecha le va a presentar al país, independiente de quien sea su candidato”.
En esa linea, Sauerbaum llama a su sector a elaborar un programa inclusivo de todas las fuerzas de derecha, que integre a los sector más afines a Republicanos y que crezca hacia los sectores de centro y moderados.