La socia fundadora de BH Compliance y expresidenta de Transparencia Internacional, Chile, fue la invitada de esta semana a La Mesa. Dice que tenemos un problema grande: no confiamos en las instituciones, y que mejorar la transparencia y fortalecer la gobernanza corporativa es un punto de partida.
Ya estamos en la cuenta regresiva para que entre en vigencia la nueva Ley de Delitos Económicos, y el nuevo intento del Gobierno por identificar a los dueños finales de las empresas, junto a su apuesta a flexibilizar el secreto bancario, dominan la conversación en directorios.
Susana Sierra, socia fundadora de BH Compliance y expresidenta de Transparencia Internacional, Chile, fue la invitada de esta semana a La Mesa de El Mostrador.
Dice que avanzar en esos temas es clave para acercar a Chile a los estándares internacionales. “Las empresas tienen que hacerse cargo y darse cuenta de que, por ejemplo, la Ley de Delitos Económicos y la de beneficiarios finales ayudan a identificar dónde están los riesgos”. Hace hincapié en la necesidad de que los directorios comprendan estos temas como parte de sus responsabilidades.
Sierra viene hace tiempo argumentando sobre la necesidad de mejorar la transparencia y fortalecer la gobernanza corporativa, como un punto de partida para mejorar las confianzas y combatir los cantos de sirena del populismo.
Advierte que hay una necesidad de mejorar los modelos empresariales, enfatizando la importancia de centrarse en riesgos reales y fortalecer la ética y la transparencia en las organizaciones.
Sobre el aspecto de la nueva legislación de Responsabilidad Penal de Personas Jurídicas, que promueve la responsabilidad de las empresas por los delitos cometidos por sus empleados, Sierra explica que esta ley, a pesar de generar cierta controversia, tiene como objetivo establecer un estándar internacional para la responsabilidad corporativa.
Respecto a flexibilizar el secreto bancario y transparentar las sociedades, destaca la importancia de conocer al beneficiario final para prevenir el lavado de activos y el narcotráfico.
Por último, en relación con los notarios, Susana expresa su insatisfacción con el sistema actual de notarías en Chile, describiéndolo como corrupto y opaco, y sugiere la necesidad de un sistema más transparente y eficiente.
