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León Gieco: «Menem nos llevó a la decadencia económica y moral»

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"En Argentina, la gente tomó conciencia de que la única forma de buscar un personaje coherente en la política es votando, ir descartando a los caducos, a estos viejos corruptos". Lapidario, el músico trasandino aprovechó su visita a nuestra país para hablar de su último disco, la relación que tiene con Los Jaivas y, era qué no, descuerar a la no tan respetable clase política de las tierras de Gardel, Borges y Maradona.


El cantautor argentino presentó anoche su nuevo disco en Chile, Bandidos Rurales, pero también reservó garganta para entonar viejos éxitos como Sólo le pido a Dios, El Fantasma de Catnerville y Los Salieris de Charly, además para hablar de temas políticos, especialmente de las elecciones presidenciales en su país.



Dos horas y medias estuvo sobre el escenario de un Teatro Oriente casi lleno, el mítico León Gieco. El trasandino vino a presentar su nuevo trabajo, placa que incluye temas como Buenos Aires (de tus amores), Ídolo de los quemados, Uruguay, Uruguay, Canción para luchar, De igual a igual y Viejos amores, entre otros que ocuparon la primera parte del show.



En la segunda mitad de su presentación, Gieco repasó temas de sus producciones previas, las cuales fueron coreadas por un público de incondicionales que, en promedio, superaba los treinta años. Entre tema y tema, como suele hacerlo, el artista argentino dialogó con el público de política, especialmente de las elecciones presidenciales argentinas donde dejó en claro su profundo rechazo a la posibilidad de que el ex Presidente Carlos Menem vuelva a ocupar la Casa Rosada. Su ironía, incluso, alcanzó a Cecilia Bolocco, esposa del líder peronista, a la cual aludió cambiando la letra de su conocido tema Orozco.



En medio de sus alusiones a la inestabilidad política y económica trasandina, Gieco preguntó «Cómo está Lagos», recibiendo un «bien» general como respuesta y aplausos para el mandatario. Pero al interrogar por la «corrupción» en Chile, la rechifla, también, fue general.



Pese a que se especuló que Illapu acompañaría a León Gieco en el Teatro Oriente, dada la amistad que los une, fueron finalmente Isabel Parra y Cecilia Echenique las que subieron al escenario para actuar junto cantautor trasandino, las que lo acompañaron para cerrar el concierto entonando el ya himno pacisfista Sólo le pido a Dios.



Previo a su actuación, Gieco se dio un tiempo en su apretado itinerario para conversar con El Mostrador.cl: "No pasa nada, loco, es parte de mi trabajo. ¿Qué querés?", comentó entre risas León Gieco ante su cargada agenda de entrevistas que lo tuvieron todo el día recorriendo raudo las calles de Santiago.



El santafesino, con una energía que derrocha en cada gesto y movimiento que hace, es un hablador casi profesional. Pasa, como pocos, de la música a la política sin complicaciones y da a conocer sus juicios sin mezquindad.



"Y claro, si nosotros los músicos no mentimos. Para qué lo haríamos si ofrecemos canciones y discos, y al que no le gusta, simplemente no los compra. No tenemos nada que ocultar", manifiesta Gieco en un nosotros que hace referencia a los Aznar, los Heredia y los Sosa, viejos socios de giras y andanzas.




El Bob Dylan argentino, como muchos lo llaman, vino a nuestro país para presentar su disco Bandidos Rurales, el que sacó hace dos años y que en su país le permitieron llenar seis veces el Luna Park y obtener el Gardel 2002 como mejor artista de rock y mejor diseño de portada.



"Bandidos Rurales es parte del registro que siempre he tenido. Fusiona el rock y el folclor como lo hacen Los Jaivas, que son mis hermanos musicales. Yo laburo con el rock y a mí los Beatles, Rolling Stones o Bob Dylan de alguna manera me han permitido escuchar la música popular de otra forma y poner el corazón en Víctor Jara o Violeta Parra", relaciona este dinosaurio de la música latinoamericana.



La hermandad de la que habla Gieco con Los Jaivas nació en los 70′ cuando la agrupación viñamarina partió a Argentina en busca de mejores bríos que en los que en Chile se respiraban. "En Belgrano nos juntábamos todas las noches con ellos y David Lebón y Charly a cantar y a chupar unos vinos. Con el tiempo terminaron siendo adoptados por los argentinos que vieron en ellos una nueva forma de hacer música y que muchos seguimos", explica. Y sobre el futuro del grupo luego de la muerte del Gato Alquinta, León augura sólo éxitos.



"Me encanta que vos te mueras y tengas hijos que puedan seguir con lo tuyo. Me parece bárbaro, una ley perfecta de la vida, porque a la larga, ya sea por accidente o enfermedad, te morís, por lo que es un acierto total que el grupo siga con los hijos del Gato", concluye para pasar a otros de los temas que lo apasiona, la política.



"Todavía no logramos encontrar a nuestro Lula"



Inevitable no hablar con Gieco de las recientes elecciones en Argentina. Gran activista social y número imperdible de cuánto espectáculo se haga sobre derechos humanos en su país y donde lo inviten, cree que lo vivido en su país el pasado domingo es "una elección buena y coherente. Primero, porque Menem perdió…".



-¿Cómo que perdió si sacó la primera mayoría?

– Sí, flaco, pero si te acordás, él sacó un 43 por ciento de los votos la vez pasada y ahora tiene apenas un 24, y en el ballotage va a perder porque todos los argentinos que no votamos por Menem en la primera vuelta vamos a votar en contra de él.



– Un voto más de negación que por convicción.
– Sí, seguro. Ahora va a ganar el candidato oficialista (Kirchner) que es un tipo que va a incentivar otro tipo de políticas, que es la de exportación y la industria nacional, es decir, justamente lo contrario de lo que hizo Menem.



– Pero no deja de sorprender la cantidad de apoyo que tuvo el domingo pasado en las urnas.
– Menem destruyó el país. Quienes lo votaron es gente que se pudo comprar una casa, un auto o que pudo ir a Miami, y que cree que si vuelve podrán hacerlo de nuevo. Dentro de esa lógica tienen razón, pero no entienden que las políticas de Menem fueron las que llevaron a la decadencia de Argentina, decadencia no sólo económica, sino moral. El deterioro del poder judicial y la asquerosa presencia como parte cultura que ahora es la corrupción, es una inmoralidad que empezó con él, y si vos juntás inmoralidad con pobreza, se arma un lío bárbaro como el que hemos vivido.



– En la canción La Memoria de Bandidos Rurales dices que las injusticias sociales "están cargadas en la memoria". Sin embargo, esa memoria al parecer no fue capaz de organizarse lo suficientemente bien como para cambiar el sistema político argentino. De hecho, la Carrió, que muchos veían como la cara del descontento, ni siquiera pasó a segunda vuelta.
– Es que aún no sabemos qué hacer con la memoria. De haber un cambio de verdad en Argentina será a muy largo plazo, porque a la gente le cuesta 20 años darse cuenta que la pifió. Además, nosotros todavía no logramos encontrar a nuestro Lula.



– Quizás lo que explica que dos justicialistas hayan pasado al ballotage es que la gente veía en Carrió la consagración de un sector inquieto pero sin historia política, por lo que se prefirió diablo conocido que por conocer.
– Yo voté por la Carrió, pero como decís la gente tiene mucho miedo de volver al caos que hubo hace un tiempo. Además, el país es diferente a cuando estaba el corralito y en ese sentido Lavagna, el ministro de economía de Dualde supo como más o menos encauzar el desastre que había, y eso les hizo ganar las elecciones. Los argentinos creyeron que era bueno darle la oportunidad a estos tipos, porque se ve como un gobierno de transición.



– Cuando Argentina estaba en plena crisis dijiste que no tenías esperanzas. ¿La has recuperado?

– No, porque un gobierno no va a solucionar el problema de Argentina. Pero pasó algo maravilloso, porque pensé que un 40 por ciento no iba a votar, sin embargo todo el mundo tomó conciencia de que la única forma de buscar un personaje coherente en la política es votando, ir descartando a los caducos, a estos viejos corruptos.



– Y entonces, descartando no te queda otra que votar el 18 de mayo por Kirchner.
– No, voy a votar en contra de Menem, que es distinto. Ahora voté por la mujer (Carrió), porque el hombre ha hecho muchas cagadas y esta es época de mujeres.

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