Una hora y media antes de lo previsto, el ex mandatario abandonó en un automóvil oficial el sanatorio de Los Arcos, situado en el barrio de Palermo.
El ex presidente argentino Néstor Kirchner fue dado de alta hoy del sanatorio de Buenos Aires en el que el domingo pasado fue operado de urgencia por una obstrucción en la arteria carótida derecha.
Una hora y media antes de lo previsto, el ex mandatario abandonó en un automóvil oficial el sanatorio de Los Arcos, situado en el barrio de Palermo.
«Estoy muy bien», dijo brevemente Kirchner a un grupo de periodistas que aguardaba su salida.
Vestido con una camisa blanca con rayas azules y una chaqueta al tono, el ex presidente saludó a quienes hacían guardia en la clínica y partió raudamente hacia la residencia oficial de Olivos, a las afueras de Buenos Aires.
El domingo pasado Kirchner, de 59 años, fue ingresado de urgencia en el sanatorio de Los Arcos, unas horas después de sufrir problemas de movilidad en la pierna y el brazo izquierdos.
Los médicos que estuvieron a cargo de la operación de remoción de la placa en la carótida derecha dijeron que la intervención fue un éxito y auguraron una rápida recuperación del ex mandatario y actual diputado.
Tanto su esposa, la presidenta argentina, Cristina Fernández, como sus dos hijos, Máximo y Florencia, estuvieron en todo momento en el sanatorio acompañando al ex jefe del Estado, lo mismo que algunos de sus partidarios dentro del peronismo que se apostaron en la puerta del centro de salud.
No es la primera vez que el ex presidente deber ser operado de urgencia.
En 2004 estuvo internado seis días en su ciudad natal, Río Gallegos (sur del país), por una «gastroduodenitis aguda con hemorragia», una complicación relacionada con un viejo mal -colon irritable- del ex mandatario.
En 2005, un chequeo que le mantuvo varias horas ingresado provocó una nueva alarma y a finales del mismo año, durante una gira por España, sufrió una descompensación.