«Para eso estoy convocando a todo el país, para vernos a los ojos para reconocernos como venezolanos para decir: queremos paz, vamos a hacer la paz», dijo el mandatario venezolano.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, convocó a una ‘Conferencia Nacional de Paz’ para el próximo miércoles con el fin de que todos los sectores se reconozcan como venezolanos y para decir que quieren paz.
«Estoy convocando a la Conferencia Nacional por la Paz de Venezuela el miércoles, aquí también en el Palacio Presidencial», recordó Maduro en una entrevista transmitida por el canal estatal VTV, en alusión a la convocatoria a sectores políticos y sociales para tratar la situación que vive el país a la que ha llamado.
«Para eso estoy convocando a todo el país a la Conferencia Nacional de Paz, para vernos a los ojos para reconocernos como venezolanos para decir: queremos paz, vamos a hacer la paz», dijo.
Maduro afirmó que la responsabilidad de la paz en Venezuela no es sólo de él, aunque él tiene la suya como jefe de Estado y la cumple, agregó.
Maduro también recordó que el lunes se celebrará una reunión del Consejo Federal, órgano al que están llamados todos los gobernadores, incluido el líder opositor Henrique Capriles, quien ha confirmado que asistirá.
El presidente dijo que tiene «diferencias» con Capriles pero reiteró su llamada a que acuda a la reunión para abordar diversos temas, entre ellos los recursos para diferentes programas relacionados con la seguridad, y se mostró dispuesto a conversar sobre lo que está sucediendo en Venezuela.
Maduro se refirió también a la situación de violencia, particularmente en el Táchira, estado occidental fronterizo con Colombia.
Acusó personalmente a Daniel Ceballos, alcalde de San Cristóbal, capital del Táchira, de ser «la mano derecha del grupo extremista Voluntad Popular», como llama al partido del dirigente opositor Leopoldo López.
Maduro dijo que ese alcalde, al que tildó de «nazi», está bajo investigación, y lo relacionó con el ex presidente colombiano Álvaro Uribe al afirmar que la zona norte de San Cristóbal ha sido sometida a un «estado de guerra».
También se refirió a supuestos planes contra las estaciones de servicio al informar de que el sábado se le requisó a una persona que supuestamente pretendía reunirse con López, encarcelado en la penitenciaría militar de Ramo Verde, a las afueras de Caracas, unos mapas de la red de hidrocarburos de Venezuela.
«Le he dicho a los cuerpos de seguridad redoblar (la seguridad), uno no sabe estos fascistas hasta dónde pueden llegar», manifestó Maduro.
Venezuela está sumida en una ola protestas desde el 12 de febrero cuando una manifestación pacífica en Caracas degeneró en actos de violencia contra edificios públicos y murieron tres jóvenes tiroteados, incidentes por los que están detenidos varios miembros del Servicio de Inteligencia (Sebin).
En las protestas han perdido la vida once personas y más de 150 resultaron heridas, mientras que decenas fueron detenidas.