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Foto: Xinhua/Str
La fuerza pública había ejecutado hasta el sábado 10.478 operativos en las 24 provincias del país, con saldo de 1.105 personas detenidas, 125 de ellas por “terrorismo”. Se ha desarticulado también a 28 grupos “terroristas” y se ha abatido a cinco de sus integrantes, según un informe de presidencia.
Contingentes de militares y policías de Ecuador incursionaron hoy domingo en las cárceles del país para restablecer el control, luego de la liberación total de agentes y funcionarios penitenciarios que fueron tomados como rehenes en motines ocurridos esta semana.
Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional confirmaron en redes sociales el despliegue de operativos conjuntos en las prisiones, acciones que incluyen el decomiso de explosivos y otros objetos prohibidos.
La institución militar informó en la red social X que aproximadamente 800 militares y policías intervinieron este domingo en la cárcel de la ciudad de Machala, en la provincia de El Oro (sur), “retomando el control y realizando el registro en el interior del centro penitenciario”.
Añadió que también se ha retomado el “control total” de la cárcel de Turi, en la provincia de Azuay (sur), tras un despliegue militar en el centro penitenciario que inició en las primeras horas de este domingo.
De acuerdo con las Fuerzas Armadas, los uniformados mantienen “el máximo control en los interiores y exteriores del centro penitenciario”.
Otros 1.100 uniformados incursionaron en la cárcel de la norteña ciudad de Esmeraldas, en la provincia del mismo nombre, fronteriza con Colombia, y en el centro penitenciario “se ha decomisado explosivos, licores, electrodomésticos”.
A medida que continúan los operativos en las prisiones ecuatorianas se esperan más detalles sobre los resultados de las incursiones y de los decomisos al interior de los penales.
Los motines en cárceles de Ecuador estallaron el pasado 8 de enero, tras la sigilosa fuga del capo de narcotráfico Adolfo Macías, alias “Fito”, de una prisión en la ciudad de Guayaquil (suroeste).
La situación que se desencadenó en los penales también fue en rechazo a la dura política de seguridad del Gobierno de Daniel Noboa, quien el 9 de enero decretó “estado de excepción” por 60 días, incluidas las cárceles, además de imponer un toque de queda nocturno ante la escalada de violencia en el país, atribuida al accionar del crimen organizado.
Noboa, quien ha rechazado negociar con “narco terroristas”, declaró un día después “conflicto armado interno” en el país, lo que permitió el despliegue de los militares en las calles para combatir a los grupos calificados como “terroristas”.
Estas bandas delictivas como “Los Choneros”, “Los Lobos” y “Los Tiguerones”, que tienen vínculos con carteles extranjeros, desataron esta semana una serie de hechos de violencia extrema como estallidos de coches bombas, ataques armados, atentados con explosivos, secuestros de policías y toma de rehenes en las prisiones.
