Según el mandatario brasileño, es “normal” que la oposición esté descontenta con los resultados que dieron la victoria a Maduro. Sin embargo, sostuvo que el CNE debe presentar las actas para que, si hubiera dudas, la oposición pueda apelar ante la Justicia, cuya decisión debe ser acatada por todos.
En su primera declaración sobre la situación en el país caribeño, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió este martes en que las autoridades electorales de Venezuela publiquen las actas de los comicios del pasado domingo y consideró “normal” que la oposición esté descontenta con la victoria atribuida al mandatario Nicolás Maduro.
“Es normal que haya una pelea”, dijo Lula en una entrevista con una emisora de televisión afiliada a la red Globo, y sostuvo que la forma de resolverla es que el Consejo Nacional Electoral (CNE) “presente las actas” para que, si hubiera dudas, la oposición apele ante la Justicia, cuya decisión “la gente tendrá que acatar”.
Con su declaración, Lula se alinea con la postura manifestada por el Presidente Gabriel Boric. Recordemos que La Moneda evitó reconocer el triunfo de Maduro tras la tardía resolución entregada por el CNE del país caribeño. “No hemos hecho más que sostener lo que creemos correcto: que los resultados de la elección sean transparentes y verificables por veedores no comprometidos con el actual gobierno mediante la publicación íntegra de las actas”, planteó el Mandatario. Ante la negativa de Chile, el gobierno venezolano decidió expulsar al personal diplomático chileno de su territorio.
El contenido de la entrevista del presidente de Brasil fue adelantado por TV Globo y supone la primera declaración de Lula desde que el CNE declaró como ganador de las elecciones a Maduro, lo que ha sido seguido por una convulsión interna y desatado una grave crisis diplomática entre el Gobierno venezolano y otros países.
Según Globo, Lula se dijo convencido de que “es un proceso normal, tranquilo”, y que si el resultado anunciado por el CNE se confirma, “todos tendremos la obligación de reconocerlo”.
Acotó que es necesario que “las personas que no están de acuerdo tengan derecho a expresarse y a probar por qué no están de acuerdo, así como el Gobierno tiene derecho a probar que tiene razón”.
Lula también criticó la cobertura de la prensa, que “trata esto como si fuera una tercera guerra mundial”, y consideró que lo que está sucediendo en Venezuela “no tiene nada grave, nada que asuste”.
Hasta ahora, Brasil ha celebrado el “carácter pacífico” de las comicios del pasado domingo, pero ha decidido no pronunciarse sobre el resultado hasta que las autoridades electorales publiquen la totalidad de las actas del proceso, “detalladas por mesa”.
El Consejo Nacional Electoral venezolano divulgó el que ha sido su único boletín durante la madrugada del lunes, con solo un 80 % de las actas escrutadas, y le adjudicó la victoria a Maduro con un 51,2 % de los sufragios, frente al 44,2 % del opositor Edmundo González Urrutia, apoyado por María Corina Machado.
La oposición, por su parte, aseguró que cuenta con más del 70 % de las actas del proceso, y que el resultado parcial es favorable a González Urrutia, de quien dijo que obtendría un 70 % de los votos frente al 30 % del presidente y candidato a la reelección.
Maduro fue diplomado por el CNE el mismo lunes, un acto que fue seguido de numerosas protestas que continuaban este martes y en las que, según la Fiscalía General, han sido detenidas unas 750 personas.
De acuerdo a datos de organizaciones no gubernamentales, también han muerto al menos 11 personas y otras 84 resultados heridas, al tiempo que el Ministerio de Defensa venezolano ha asegurado que está en marcha un “golpe de Estado” orquestado por “factores fascistas de derecha extremista”.