Sobre el comentado libro de Auletta (que ya es posible bajar por US$5 desde Kovo a cualquier smartphone) Googled: The End of the World As We Know It, se ha escrito bastante y el mismo Ken Auletta (redactor del New Yorker) le ha sacado el jugo con una decena de artículos sobre todo lo que aprendió del mayor exponente de la revolución digital de la década que se va. Sin embargo, aún hay mucho que sacar de interior de esta empresa que nació en 1997. Tanto medios como empresarios deben recoger las lecciones de lo que Google ha enseñado. Si la que se va es la década de la participación, la que viene es la de la empatía. La industria (y los medios) no sólo deben dar espacios a sus audiencias, sino que deben construir con ellas. En la nueva industria no hay certezas (los gurués se diluye, por suerte) y tampoco amigos o enemigos evidentes, pero hay creatividad y pasión. Acá el texto completo sobre Google.
1. La pasión triunfa
Partamos con el consejo que Larry Page ofreció a los graduados de Stanford: «No se acomoden». Esta intención se reveló con el fervor con el que él y Sergey Brin inspiraron a la empresa a «servir al usuario», a mejorar radicalmente la búsqueda. O como me contó el CEO Eric Schmidt: mientras él asumía que «Google sería una compañía importante; los fundadores siempre asumieron que Google sería una compañía definitoria».
2. Se necesita foco
La pasión sin foco puede conducir al extravío. Bill Campbell, un mentor de Silicon Valley, pasa un par de días a la semana en Google y piensa que la clave del éxito de ésta es su «pasión enfocada». Para él, Schmidt fue quien les dio un foco a los fundadores. El empresario de medios, Barry Diller, piensa que lo que antes se veía como rudeza en Google, en realidad era foco. «Las cortesías de negocios les importan mucho menos que al resto. Y se han mantenido fieles a ellos mismos. Es una fortaleza espectacular».
3. También se necesita visión
Sin visión, incluso la pasión más enfocada es como una pila sin aparato. «No seas malo» es un encantamiento vago. Pero el esfuerzo de Page y Brin por lograr que «toda la información del mundo esté disponible», y por servir a los usuarios, es una visión. Esto llevó a que Google indexara exitosamente la red, lograra que se pudiera buscar noticias y libros, tratara a los avisos como información, ayudara a los usuarios a buscar los productos más baratos, a encontrar direcciones y almacenar y compartir sus correos electrónicos.
4. Una cultura de equipo es vital
La asignación de un 20% del tiempo de los empleados de Google a proyectos que ellos elijan les otorga un sentido de apropiación. Fiel a sus ideales de fuentes abiertas y sabiduría-de-las-masas, Google ha creado una administración en red que funciona tan bien desde abajo hacia arriba como desde arriba-abajo. En ambas direcciones, libera ideas y esfuerzos. Larry Page observa: «Uno quiere tener una cultura en que la gente que hace el trabajo, los científicos y los ingenieros, esté empoderada».