Publicidad

De Cúcuta a Chacalluta

Publicidad
Por: Jorge Gillies


Señor Director:

La crisis venezolana sigue influyendo fuertemente en el escenario político local. Fracasada la “Operación Cúcuta”, que con la participación relevante del presidente Piñera pretendió en febrero producir un rápido reemplazo del régimen de Maduro, es hoy la ex presidenta Bachelet quien ha adquirido mayor protagonismo en el tema. El informe presentado en su calidad de Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los DDHH es concluyente referente a la crítica situación que vive el país caribeño.

Si Cúcuta fue un fracaso en cuanto a la instalación de Juan Guaidó como presidente y terminó consolidando por lo menos temporalmente a Maduro, está por verse cuál será el efecto del detallado informe de la Alta Comisionada. En todo caso, ha logrado generar por lo visto un amplio consenso sobre la real situación venezolana, que podría ayudar a empujar el diálogo iniciado en Oslo entre las partes en conflicto.

Pero las formas de encarar la crisis no se dan solo en las altas esferas políticas, sino que se enmarcan en un creciente drama humanitario. Y al igual que en el Mediterráneo o el Río Bravo, la frontera entre Chile y Perú se ha transformado en un escenario de ese drama, con centenares de venezolanos esperando en el paso fronterizo de Chacalluta.

Y no se vislumbra una solución a corto plazo de la crisis migratoria. Es de esperar que –de cara a los procesos electorales que tendrán lugar los próximos dos años- ésta no se transforme en un tema que enrarezca aún más el caldeado ambiente político, alentando posiciones nacionalistas y xenófobas.

Jorge Gillies,

Académico de la Facultad de Humanidades y Tecnología de Comunicación Social, UTEM

Publicidad

Tendencias