Señor Director:
Como si fuese un presagio frente a la escasez en 2010, Kofi Annan propuso que el agua para consumo fuese un derecho humano y consecuentemente una nueva garantía para cada habitante del planeta.
Este está compuesto mayoritariamente por agua de mar y solo un 3 % de aguas continentales son dulces y se obtienen del ciclo hidrológico y de la evapotranspiración. Al nacer estamos compuestos por 70 % de agua que con el correr los años disminuye tan solo un 10 %. Nuestra realidad local es que contamos con una importante cobertura sanitaria entregada a concesionarias, además de los aportes de las cooperativas gestionadoras del vital elemento en áreas rurales impulsadas por el Ministerio de Obras Públicas.
Sin embargo, la sequía que llego hace más de una década para quedarse, obligando a tener a zonas de estrechez hídrica ya en forma permanente, ha generado la necesidad de repartir, a más de un millón de compatriotas y migrantes, agua en camiones aljibes.
El mercado del agua diseñado por Hernán Buchí a fines de los setenta en donde los usos sanitarios, industriales, mineros y agrícolas compiten, no ha asignado adecuadamente el recurso y tenemos muchas cuencas hidrográficas como la de Copiapó, cuarta región, donde se asignaron más derechos de agua de los que se en la realidad se debieron haber otorgado. La asignación del recurso escaso se hizo por años, sin oposición alguna y en forma gratuita fomentando la especulación y existió incluso un caso de ripley en que se concedieron y posteriormente inscribieron las aguas negras de la cuidad de Calama en el Registro de Aguas del Conservador de Bienes raíces haciendo fracasar una licitación internacional de una planta depuradora o de tratamiento a mediados de los noventa.
Por su parte, un empresario minero extrajo en forma ilegal y mediante bombas hasta una profundidad de más de 80 mts, el 20 % de la recarga natural del acuífero o aguas subterráneas de la Pampa del Tamarugal en la Región de Tarapacá, apropiándose del agua en el desierto más árido del mundo. Con un fallo por daño ambiental, se obtuvo el cierre de más de 20 captaciones ilegales para procesar yodo y los responsables fueron formalizados por usurpación de aguas.
En el mes de febrero la Corte Suprema de Justicia, ha fallado en favor de comunidades Aymaras de la Región de Arica y Parinacota, la recuperación de sus aguas y usos ancestrales, tema extremadamente importante para quienes bajan, año a año, desde la puna al mar pidiendo abundancia de aguas para realizar sus actividades agrícolas en bofedales acorde a su cosmovisión.
Invocando la sabiduría de nuestros ancestros celebremos el Día Internacional del Agua.
Daniel Benoit M
Experto en medio ambiente y recursos naturales
