Señor Director:
Urgencia manifestó el Gobierno al sostener que una de sus prioridades antes del cambio de mando es avanzar en la aprobación el proyecto de Ley de Fármacos II. A pesar que la comisión mixta de dicho proyecto realizó solo siete sesiones durante 2021 (y con escaso avance), la Segpres ingresó este lunes 10 de enero una indicación para llegar a un acuerdo respecto de la normativa que contempla el Observatorio de Precios de Medicamentos. Esperan resolver en una última sesión esta ley que lleva seis años de tramitación y sin dimensionar el impacto que podría tener.
Esta entidad tendría potestad para fijar valores máximos a ciertos productos. De este modo se podría fijar una tarifa de dispensación única para todo el mercado. Esto según la experiencia en Latinoamérica tendría un efecto contrario al esperado pues disminuiría la competencia entre los medicamentos genéricos lo cual podría resultar, finalmente, en un incremento de su precio. Esta experiencia ya ha ocurrido en Ecuador y Colombia donde se implementó la regulación de precios y hoy los genéricos valen tres veces lo que cuestan en Chile.
La regulación de precios debería ser solo para medicamentos sin competencia, que en Chile son los más caros de la región, así como para aquellos que se alejen en demasía a lo determinado por dicho Observatorio de Precios. Se debe destacar que la gran mayoría de los medicamentos utilizados en Chile corresponden a genéricos y genéricos de marca, muchos de los cuales se elaboran en Chile y que por cierto son los más baratos de Latinoamérica, por lo que implementar una política pública cuyos alcances no sean analizados apropiadamente y que no incluya esta distinción será perjudicial para mantener el acceso universal y oportuno a medicamentos de calidad en Chile.
Elmer Torres, vicepresidente de la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos, Asilfa.