El hecho que los medios de comunicación transmitan información tendenciosa para proteger los intereses de la élite económica en desmedro de los intereses de la población no es algo nuevo ni anormal. Este fenómeno, poco conocido por algunos, se enseña en clases introductorias en las facultades y escuelas de comunicación en la mayoría de las universidades. Como docente en Simon Fraser University, Canadá, yo mismo hago clases sobre la tendenciosidad estructural de los medios de comunicación en un curso de introducción a la comunicación de masas. La industria cultural de Adorno y Horkheimer, el modelo de propaganda de Herman y Chomsky, y el ensayo sobre los aparatos ideológicos del estado de Althusser, por citar algunos modelos y teorías, se enseñan para ilustrar la parcialidad de los medios de comunicación al manufacturar noticias y distribuir información. Por lo tanto, el hecho que los medios de comunicación tradicionales (léase El Mercurio, La Tercera, Canal 13, Chilevisión, etc.) realicen una cobertura tendenciosa sobre el proceso constituyente no es algo anómalo. Por el contrario, sería muy atípico que estos mantuvieran una posición imparcial e informaran de forma veraz el trabajo de la Convención y el contenido de la propuesta de nueva Constitución.
En las próximas líneas detallaré las 12 formas más comunes de apoyar al Rechazo que los medios de comunicación utilizan al momento de manufacturar noticias sobre el proceso constituyente, la Convención y la propuesta de nueva Constitución.
- Farandulización. Mediante una intensa cobertura de las anécdotas personales de los convencionales, los medios de comunicación farandulizan y desprestigian la labor de la Convención. Aspectos sin mayor relevancia de la vida privada de los convencionales hacen portada de forma habitual con el objetivo de frivolizar y banalizar el trabajo de la Convención y disminuir su legitimidad social.
- Descontextualización. El contenido de la propuesta de nueva Constitución que necesita de contexto para su cabal comprensión es publicado como títulos, frases sueltas, fragmentos y de forma descontextualizada. El propósito de esta operación es alterar la comprensión del contenido y en algunos casos revertir el sentido, significado y el alcance del texto.
- Simplificación. Similar a la anterior operación, la simplificación tiene como objetivo adulterar la comprensión de la propuesta de nueva Constitución. Sin embargo, a diferencia de la descontextualización, la simplificación se aboca en excluir complejidades, eliminar gradaciones, omitir alcances y presentar las ideas de forma plana, superficial y sin profundidad.
- Desinformación. Esta acción se orienta a distribuir información falsa sobre la labor de la Convención de forma deliberada. Mediante fuentes no confiables, autores inexistentes, expertos que no lo son, registros inauténticos o desactualizados, partidismo en las fuentes, y en general estándares poco rigurosos, los medios de comunicación publican noticias falsas para desinformar sobre el proceso constituyente y la propuesta de nueva Constitución.
- Repetición. Noticias negativas sobre la Convención se reciclan y publican una y otra vez, abordándolas desde diferentes puntos de vista, creando la sensación que se está en presencia de nuevos acontecimientos cuando en realidad aquello no es cierto. El objetivo es aumentar artificialmente la cantidad de noticias negativas sobre los convencionales y la Convención para desprestigiar su labor.
- Encuestitis. Esta es una forma de cobertura que enfatiza las encuestas y las posibilidades estadísticas que tienen el Rechazo y el Apruebo de obtener una victoria en el plebiscito de salida. El objetivo es reducir el espacio mediático para el análisis profundo de tópicos de mayor interés de la propuesta de nueva Constitución. La discusión cualitativa tan necesaria para la toma de decisión de la ciudadanía es reemplazada por una discusión probabilística estéril y especulativa.
- Ideologización. Se trata de la desproporcionada tribuna que los partidarios y los apologistas del Rechazo reciben en los medios de comunicación. Pensadores conservadores, profesores neoliberales, líderes empresariales y celebridades reaccionarias cuentan con una palestra privilegiada para descalificar el proceso constituyente y banalizar el contenido de la propuesta de nueva Constitución mediante frases triviales y figuras retóricas.
- Rumorización. Este es el sofisticado arte de transformar rumores en noticias. Rumores sobre la Convención y los convencionales son reportados bajo la pretensión de plausibilidad a pesar de que no existen pruebas fácticas ni creíbles que apoyen los rumores. Al igual que la farandulización, esta acción busca enlodar el trabajo de los convencionales y deslegitimar el proceso constituyente.
- Radicalización. Se refiere a la cobertura amplificada que grupos minoritarios radicales al interior de la Convención reciben por parte de los medios de comunicación para enmarcar la Convención como un órgano compuesto por extremistas. El objetivo de esta operación es presentar la Convención como un nido de radicales y fanáticos, y de esta manera, representar la propuesta de nueva Constitución como un texto lejos del espacio social de consenso.
- Sensacionalismo. Método que utiliza intencionalmente un lenguaje exagerado y provocativo al cubrir temas de la Convención para gatillar el interés del lector. El objetivo es doble, capturar la atención de la audiencia (para efectos del rating) y saturarla emocionalmente de forma negativa para predisponerla en contra del proceso constituyente y la propuesta de nueva Constitución.
- Homologación. Es la estrategia de presentar las opciones del Rechazo y Apruebo como opciones equivalentes de un proceso de reforma constitucional, minimizando distinciones históricas, procesos sociales e inequidades estructurales (clase, género, raza y orientación sexual) que hacen del Rechazo y el Apruebo opciones incomparables entre sí.
- Desertificación. Es el proceso de degradación de la esfera pública, en que el espacio público fértil y productivo para el debate y la discusión democrática pierde su potencial a causa de la acción erosionante de los medios de comunicación. La renuencia de los medios de comunicación a presidir un debate imparcial, honesto y participativo sobre el contenido de la propuesta de nueva Constitución erosiona al Apruebo y fortalece la opción Rechazo que defiende el statu quo.
-
El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no
refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.