Señor Director:
Ante la disminución de la jornada laboral a 40 horas, surge el debate en torno a la productividad. Según un estudio de la CCS, entre 222 empresas de distintos tamaños y sectores, apenas un 18% cree que la productividad puede aumentar, mientras un 34% no anticipa cambios y un 36% se muestra pesimista.
Lo cierto es que diversos países que han pasado este tránsito, han demostrado que sí se puede trabajar menos horas y aumentar la productividad, como es el caso de Islandia, Irlanda, Bélgica, Suiza, entre otros. Un factor común entre ellos es la automatización de sus procesos y el uso de las tecnologías de la información.
En efecto, de acuerdo al Informe Nacional de Productividad 2021, se produjo un 4,6% más en pandemia y con trabajo a distancia, gracias a la reducción de tiempos de desplazamiento, horarios de trabajo flexibles y la adopción de herramientas de colaboración virtuales eficaces.
Ciertamente, las empresas se han dado cuenta de que el trabajo remoto es posible, seguro y eficiente, incluso, que la productividad puede mantenerse o aumentar con una dirección clara por objetivos, entregables y reporte por horas. De hecho, en la actualidad la mayoría de los empleados de un espectro importante de empresas trabaja de forma remota entre 2 y 3 días a la semana con buenos resultados.
No obstante, para ello es vital implementar una infraestructura digital sólida que contemple la incorporación de nuevas tecnologías, como los sistemas de administración de recursos empresariales 100% web, que facilitan el trabajo a distancia y la modalidad híbrida, con importantes ventajas que se traducen en mayor eficiencia y optimización de tiempo y recursos.
Aquí no se trata de cantidad, sino de calidad y todos los sectores de las compañías se ven beneficiados por el aporte tecnológico, desde el área de ventas que puede aumentar su número de reuniones vía teleconferencia, hasta las administrativas con los sistemas de gestión cloud, que permiten la centralización de toda la información ingresada por los colaboradores, desde distintos lugares, en una plataforma única con acceso desde cualquier dispositivo con conexión a internet.
Así, ante los nuevos desafíos que impone el escenario actual, una reducción de la jornada laboral y una digitalización robusta, resiliente, ágil y escalable, pueden ser no solo una oportunidad de crecimiento, sino también la manera de ser más productivos.
Diego González