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Vertederos de ropa y la urgencia de tomar acción

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Por: Bárbara Pino


Señor Director:

Gran impacto a nivel global ha causado el reportaje de la agencia AFP que denuncia la existencia y expansión de un vertedero de ropa y textiles en nuestro desierto de Atacama. Para quienes trabajamos por la construcción de un sistema sostenible para la industria de la moda, es un alivio que la comunidad internacional condene lo que venimos denunciado hace años.

La industria mundial de la moda es un sistema complejo, guiado por la lógica del crecimiento: produce más (pero mucho más) de lo que los mercados necesitan y consumen. ¿Qué pasa con lo que sobra? Termina en fardos que navegan por el mundo hasta llegar a países como Ghana o Chile. Allí, lo que no se vende — porque sigue siendo demasiado—, se bota dónde pareciera que nadie lo ve…

Algunos dicen que la solución es la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), mediante la cual los productores de estas prendas y otros productos prioritarios son responsables de la organización y financiamiento de la gestión de los residuos derivados de su comercialización en el país. Pero, lamentablemente, es una ley que solo “REPara” y mitiga las consecuencias de la nula regulación sobre el ingreso desproporcionado e inconsciente de la basura textil desde el norte del mundo a Chile, disfrazada de fardos de ropa usada.

Con eso no basta, hay que preocuparse del ciclo completo: el antes, el durante y el después de nuestra ropa. Esto significa que es necesario y urgente aunar perspectivas y trabajar para: 1.- regular el ingreso de materias textiles a nuestro país; 2.- educar al consumidor en torno a comprar y prolongar la vida útil de las prendas; 3.- fomentar la industria de la moda nacional (aunque sea pequeña); 4.- apoyar la investigación en centros especializados para diseñar nuevos usos para los textiles en desuso; 5.- y finalmente invertir en la creación de nuevas empresas dedicadas al reciclaje y reutilización de los desechos textiles.

Seguramente todo esto a muchos dolerá, pero de seguro será un alivio para nuestro desierto.

Bárbara Pino, directora del Observatorio de la Moda/Modus UDP.

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