Sobre la educación presencial
Señor director:
La semana pasada, un medio de circulación nacional publicó una entrevista al profesor Claudio Rama, invitado a exponer en un seminario de e-learning, quien planteó dudas respecto del impacto y futuro de la educación presencial, aludiendo a que la educación online se adapta mejor a las necesidades de los estudiantes, atribuyéndole una “forma de libertad”.
Respecto del rol que tiene la presencialidad en los vínculos humanos, el señor Rama afirma que las interacciones sociales pueden ocurrir en otros espacios en reemplazo, tales como las redes sociales, el gimnasio o los partidos políticos. Este planteamiento es discutible, pues el hecho de interactuar con otros en un ámbito no implica que no sea favorable el intercambio social en una sala de clases.
Frente a la pregunta sobre la efectividad de ambas metodologías (presencial y a distancia), el profesor asegura que la educación presencial está en crisis, mientras que la educación virtual cuenta con simuladores y formas de control de plagio más avanzados que el sistema presencial. El argumento también es discutible y, en ningún caso, generalizable.
Concuerdo con el profesor Rama respecto de las muchas posibilidades que ofrece la tecnología para los métodos de enseñanza-aprendizaje; la tecnología puede mejorar ambos, aunque no siempre de manera equivalente ni para todas las carreras. En nuestra institución dictamos carreras presenciales y solo algunas de ellas se dictan también en modalidad online.
A nuestro juicio, existen disciplinas en que la formación online aún no puede suplir aspectos clave de la presencialidad, especialmente en la formación técnico profesional, cuya pedagogía descansa en una formación práctica, que requiere de múltiples herramientas y equipamiento, en talleres y laboratorios. En estas experiencias, la presencialidad replica ambientes productivos reales, lo cual es fundamental para una inserción laboral exitosa y productiva.
Adicionalmente, la presencialidad favorece el trabajo en equipo, el liderazgo, la comunicación efectiva y otras competencias genéricas que son cada vez más demandadas por los sectores productivos y de servicios. Esto cobra aún más relevancia cuando el aprendizaje es multidisciplinario, relevando el valor de aprender con otros, compartiendo espacios y desafíos con compañeros y docentes de otras carreras.
Por lo tanto, la educación presencial tiene mucho que aportar al desarrollo de nuestro país, y puede seguir mejorando su eficacia con el apoyo de las herramientas tecnológicas que están surgiendo en la actualidad. No es necesario, ni contribuye, ponerla en duda para abrirle espacio a la educación online, la cual también cumple un rol relevante y suple las necesidades de muchas personas.
Lucas Palacios C.
Rector de INACAP