Los Drumlins de Magallanes ¿otras víctimas del “progreso”?
Señor director:
La región de Magallanes se caracteriza por tener áreas naturales con poca intervención humana, algunas de ellas poco conocidas por el público en general, pero que nos permiten estudiar y aprender del pasado geológico de la región y, por extensión, del país y del mundo.
Así podemos encontrar entre otras geoformas, los Drumlins, que son montañas alargadas con forma de ballena de poca altura, que se formaron en la base del terreno por donde se movía la masa glaciar y son una evidencia concreta del último máximo glacial que afectó la Patagonia hace unos 30 o 20 mil años atrás, donde los glaciares cubrían casi todo el territorio. Las ubicaciones de estos Drumlins en Magallanes (52º49´07” S; 70º58´59”O) constituyen uno de los sitios terrestres de alta resolución más australes en las latitudes medias del hemisferio sur y mejor conservados del mundo. Los registros de cambios paleoambientales desde aquí también pueden compararse con los cambios en el ámbito antártico.
Esta riqueza natural, irremplazable, tiene no solo relevancia para la ciencia, sino que también representa un patrimonio regional que puede ser importante para la industria del turismo de intereses especiales, entre otros.
Lamentablemente, la presencia de estas geoformas está amenazada por los avances de la nueva industria del Hidrogeno verde. Los estudios realizados en las zonas donde se instalarían los grades aerogeneradores, necesarios para esta industria, incluyen el sector Laguna Cabeza del Mar, un lugar cercano a la Ciudad de Punta Arenas, donde se encuentran justamente los Drumlins mejor conservados de la región, sino los únicos.
La idea no es detener el progreso de la región o del país, sino llamar la atención de las autoridades para generar las instancias que permitan un justo equilibrio entre el progreso y la conservación de nuestro patrimonio natural.
Pedro Cid Agüero, Ph.D.