Durante toda la pandemia, una de las reflexiones constantes de gran parte de la población mundial, ha sido pensar en algo que sabemos desde muy temprana edad, «la muerte» .
Esta conversación se han generado por las altas tasas de fallecidos por causa del COVID-19, entonces fue ahí, cuando en mi cuarentena de más de 65 días, me pregunté ¿Cuánto vale la vida en Chile? Y ¿Qué elementos son necesarios hoy para aumentar la expectativa de vida de los seres humanos? fue entonces, cuando navegando por google, me di cuenta, de la comercialización en el mercado chileno, de lo que hoy son elementos de primera necesidad; camas clínicas, ventiladores mecánicos invasivos y no invasivos. Elementos con los cuales hoy por causa del COVID-19, generan una alta expectativa de vida, en el caso que cuentes con estos artículos, hoy vitales para la sobrevivencia de la especie humana en riesgo de contagio o ya contagiada.
Al ver esto pensé en lo trágico de la situación, una cama clínica manual o eléctrica, tiene un valor en el mercado chileno de entre $300.000 y $1.000.000 de pesos en promedio.
Un ventilador con una función invasiva y no invasiva, se cotiza en el mercado chileno a un valor de entre $4.500.000 y $7.000.000 millones de pesos, incluso tienes la posibilidad de encargar este aparato, para los próximos meses.
Es decir, dos de los elementos que más escasean en el mercado, son posibles de conseguir hoy en Chile, por un valor promedio hoy (aumentará en razón de la demanda) de $6.000.000 millones, eso cuesta hoy aumentar tus expectativas de vida, si das positivo al Covid-19 y presentas un cuadro de salud grave en tú sistema respiratorio.
Esto me parece absolutamente inaceptable, no es posible que elementos de primerísima necesidad, que permiten «salvar vidas» se trancen en el mercado chileno, sin ningún tipo de regulación, es más, creo y propongo a las autoridades correspondiente, decretar la expropiación de todos los implementó médicos disponibles en el mercado y que sea este, «Él Estado» y personal de salud, quienes lo distribuyan en razón de las necesidades, que tiene y tendrá, nuestro sistema integrando de salud, hoy en la lucha contra el Covid-19.
Es una de las atribuciones del Estado de Excepción, y que basándose en el artículo 43 inciso 3º de la Constitución política de la República de Chile, que estipula que “por la declaración del estado de catástrofe, el Presidente de la República podrá restringir las libertades de locomoción y de reunión. Podrá, asimismo, disponer requisiciones de bienes, establecer limitaciones al ejercicio del derecho de propiedad y adoptar todas las medidas extraordinarias de carácter administrativo que sean necesarias para el pronto restablecimiento de la normalidad en la zona afectada”, esto nos indica que es él Presidente, quien sí tendría esta potestad (requisar bienes) y según mí opinión debe hacerlo lo antes posible.
El sistema de salud colapsara, según algunos expertos durante la última semana de mayo o primera de junio y será ahí, donde personal de salud debería decidir, tal como lo hicieron ya los italianos, quien vive y quién muere. Esto a causa de la falta de camas UCI y ventiladores mecánicos, la tasa de muertes por Covid-19 crecerá a tal punto, de que la gente morirá no sólo de Covid-19, si no también, a causa de la falta de una cama clínicas o un ventilador mecánico, incluso, porque no tengamos a los especialistas necesarios para cubrir la alta tasa de pacientes que necesitarán ayuda médica por distintas causas y enfermedades.
No es posible, que mientras algunos mueren por no recibir ayuda médica o tener los implementos necesarios, otros comercialicen estos elementos de primera necesidad, incluso a quienes pueden no necesitarlo y que lo adquieran por «acaparar» artículos, hoy vitales para la vida humana.