Sin duda alguna tuvimos un año que nos enseñó más que ningún otro. Producto de una pandemia jamás imaginada por nuestra sociedad, nos vimos en la necesidad de replantearnos muchas cosas, desde temas emocionales hasta laborales.
Producto de las cuarentenas, las empresas se vieron en la obligación de adecuar la manera en que algunos de los trabajos se desarrollaban, implementando el homeoffice como una de las medidas más importantes, lo que hace meses resultaba totalmente impensado, debido principalmente al temor respecto de cómo podrían los colaboradores ejercer sus labores. Sin embargo, y para sorpresa de todos, se puede decir que ha sido un logro desbloqueado.
Hemos notado una favorable “reconstrucción” del mercado laboral. Áreas como las de ventas y marketing han tenido un inesperado impacto positivo, siendo el e-commerce una plataforma que ha llegado a dar fortalecimiento y esperanza a los negocios, en especial al retail. Esto ha generado un aumento en los salarios de cierto perfil de profesionales, quienes cuentan principalmente con mayores conocimientos en el rubro y han propiciado el avance. Sin duda un punto a considerar por las empresas relacionadas, quienes deberán aplicar lo aprendido en el 2020 si quieren mantener la buena racha.
Quién diga que no fue un año ajetreado, miente. Sectores como Minería, Energía y TI están y seguirán muy movidos en el 2021. Estas áreas vieron cambios importantes en términos salariales, al ofrecer notables aumentos en las remuneraciones, producto de la escasez de ciertos perfiles de profesionales. Son varias las compañías que están buscando un tipo de colaborador muy específico, ya sea porque hicieron ajustes demasiado grandes en sus estructuras, pensando que la recuperación sería más lenta o porque la manera en que se ha gestionado la crisis sanitaria dentro de estas mismas ha develado que necesitan una renovación.
A pesar de la vorágine, nos dimos cuenta cuán importante es fortalecer las relaciones interpersonales y mejorar los estilos de liderazgo. En el 2020 vivimos momentos de mucha incertidumbre, con pocas respuestas y visibilidad, respecto a cómo irán las distintas industrias. Sin embargo, debemos tener el convencimiento de que este próximo año pondremos en marcha todo lo aprendido. Que las empresas reclutarán a profesionales altamente capacitados, de otros lugares gracias al trabajo a distancia y siempre pensando en la integridad de la persona, lo que hace posible que existan mejores líderes, capaces de incentivar a sus pares y contagien de buenas e innovadoras ideas a la organización.