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El espolonazo de Carmona (el oficialista) a Jadue (el opositor) Opinión AgenciaUno

El espolonazo de Carmona (el oficialista) a Jadue (el opositor)

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Germán Silva Cuadra
Por : Germán Silva Cuadra Psicólogo, académico y consultor
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La guinda de la torta vendría cuando el exprecandidato presidencial se lanzó contra el intento de acuerdo que el oficialismo trata de lograr con la oposición para salvar la reforma de pensiones, que hoy pende de un hilo, a menos de tres semanas de que se cumpla el plazo definido por las partes.


La verdad es que el Partido Comunista (PC) siempre ha sido una colectividad disciplinada, un partido cuadrado con el Gobierno cuando ha estado en el poder, pese a que jamás uno de los suyos ha conducido La Moneda. Lo fueron en la Unidad Popular, pese a que el Presidente Allende era socialista, y lo mantuvieron también durante el Gobierno de Michelle Bachelet.

Sin embargo, durante el mandato de Gabriel Boric se ha mostrado más tambaleante. No la directiva del partido –encabezada primero por Teillier y luego por Carmona–, pero sí una parte importante de sus bases, los llamados “disidentes”.

Y, claro, la figura de Daniel Jadue ha constituido un verdadero dolor de cabeza para los líderes de la colectividad comunista. Primero, por la derrota que sufrió al perder las primarias con Boric, un hecho que hasta un par de meses antes de esa fecha se veía como poco probable. Recordemos que Jadue encabezaba, por lejos, todas las encuestas junto a Joaquín Lavín.

De ahí en adelante, Jadue se convirtió en un crítico del hoy Mandatario y agudizó sus posiciones más duras. De seguro, algo de resentimiento y bronca le quedó contra el ganador de las primarias.

Si no hubiera sido por el período en que estuvo en Capitán Yáber, de seguro, el exalcalde de Recoleta habría puesto al PC en un rol incómodo, al ser un partido que forma parte del Gobierno, incluyendo ministerios clave como la Secretaría General de Gobierno, Trabajo y Educación.

Jadue hoy difícilmente podría clasificarse como un hombre partidario del Gobierno. “Buena parte de la izquierda sale electa con ideas de la derecha”, dijo categórica y despectivamente en las semanas previas a la elección de gobernadores y alcaldes. En mayo de 2024 advertía que, con esta contradicción, la izquierda dejaba de ser una alternativa, regalándole una oportunidad a la ultraderecha para instalarse como el único sector contestatario del modelo.

Con desazón y apuntando al Gobierno de Boric, Jadue remataba afirmando que “terminamos salvando las isapres, las AFP, militarizando La Araucanía y aprobando leyes represivas que no resuelven el tema fundamental de la delincuencia”.

Con Daniel Jadue de vuelta con todo a la arena política, desde su arresto domiciliario total ratificado el 30 de diciembre, se agudizaron sus opiniones y críticas hacia el Gobierno y el papel cumplido por su partido en la administración de Boric. “Hoy, percibo que la izquierda real tiene muy poca incidencia en el Gobierno. ¿Qué podría decir un Gobierno que condonó la deuda a todas las isapres de una u otra manera, pero no llegará a aprobar la condonación del CAE?”, sentenciaba el exalcalde, en alusión directa a su partido.

Pero la guinda de la torta vendría cuando el exprecandidato presidencial se lanzó contra el intento de acuerdo que el oficialismo está tratando de lograr con la oposición para salvar la reforma de pensiones, que hoy pende de un hilo, a menos de tres semanas de que se cumpla en plazo definido por las partes, el 31 de enero, cuando vence el periodo legislativo y los parlamentarios inician su largo descanso.

La paradoja es que quien encabeza las negociaciones es la ministra de su colectividad, Jeannette Jara. Jadue, apoyado por un grupo de diputados del PC –Carmen Hertz, María Candelaria Acevedo, Lorena Pizarro y Matías Ramírez– llamó a dejar caer la iniciativa, argumentando a través de la red X que “es mejor retirar el proyecto que seguir aumentando las ganancias y la estafa de las AFP. #No+AFP”.

La molestia del sector oficialista del PC se hizo sentir de inmediato. Fueron el propio Carmona, junto con Bárbara Figueroa, los que salieron al paso de Jadue, blindando a la ministra Jara. “La opinión formal del Partido Comunista la representa Bárbara Figueroa como secretaria general y quien habla como presidente”, dijo categórico el exdiputado, agregando que la batalla contra las AFP está pendiente, “pero debemos ser capaces de mejorar las condiciones actuales de nuestros jubilados”.

A solo unos días de que comience el Congreso Nacional del PC –parte el 10 de enero–, la señal de la directiva del partido no solo tranquilizó las aguas en La Moneda, sino que, además, le permitió a Lautaro Carmona acercar posiciones con la disidencia de la colectividad y asilar a Jadue, una jugada clave, pensando en que el pacto interno le puede facilitar a Carmona la reelección –junto a Figueroa– y, por supuesto, volver a competir por un cupo en el Congreso. Una muestra más de la disciplina y pragmatismo con que el Partido Comunista se ha manejado siempre que le ha tocado estar en el poder.

Una disciplina del PC que ya se quisieran otros partidos del oficialismo y la oposición.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.

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