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El Chile antártico vs. el Chile continental Opinión Imagen: @GabrielBoric

El Chile antártico vs. el Chile continental

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Richard Kouyoumdjian Inglis
Por : Richard Kouyoumdjian Inglis Experto en Defensa y Seguridad Nacional
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La contingencia ensució lo importante que es la primera vez que un Presidente chileno pise el Polo Sur, pero ello no le quita mérito al hecho y así quedará registrado en los libros de historia: que Gabriel Boric fue el primer Presidente chileno en llegar al Polo Sur.


La reciente visita del Presidente Gabriel Boric al Polo Sur generó aplausos entre los que entienden su importancia estratégica y geopolítica, y pifias por parte de quienes dicen que era algo innecesario y poco relevante, tanto porque hay problemas más importantes que atender o bien porque, equivocadamente, no entienden los derechos o reclamaciones que Chile tiene sobre su territorio antártico desde que Pedro Aguirre Cerda así lo estableciera, a comienzos de los 40 del pasado siglo.

Para que seamos claros, y no como piensan algunos que no se han dado el tiempo de leer el Tratado Antártico de 1959, Chile mantiene sus derechos y reclamaciones soberanas sobre lo que se llama el Territorio Antártico Chileno, un espacio de 1.250.257 km2, lo que es el 63% del territorio nacional y un 66% más que la suma del Chile continental e insular, y que se sitúa entre los meridianos 53° y 90° Oeste.

El Territorio Antártico Chileno fue establecido por el Presidente Pedro Aguirre Cerda en el decreto 1747 del 6 de noviembre de 1940, y se hizo poco después de que Noruega lo hiciera sobre otra parte del Continente Antártico.

La Argentina hizo lo propio un par de años después de Chile, habiendo al día de hoy, aparte de los recién mencionados, otros cuatro, que son Australia, Nueva Zelanda, Francia y el Reino Unido, todos los cuales son países firmantes del Tratado Antártico, que dejaron claro en el artículo IV que sus derechos soberanos y reclamaciones no se ven afectados por el hecho de haber aprobado el tratado en cuestión, lo que es obvio, ya que, si se hubieran visto disminuidos o anulados, ninguno habría firmado.

Respecto de que el Territorio Antártico Chileno no es una prioridad o no está en las prioridades de los chilenos, eso tiene algo de verdad. Una reciente encuesta señala que solo un 26% de los encuestados indicó que el viaje presidencial era algo importante, pero ello no quita que el Gobierno y que quienes detentan la autoridad en Chile actúen en concordancia con las opiniones quizás desinformadas de buena parte de los chilenos, los que correctamente están preocupados de otras materias que los impactan en el día a día.

No es que las acciones presidenciales sean binarias (uno o lo otro), con un Ejecutivo pronto a alcanzar 25 ministerios y una organización estatal enorme, pero deberían ser capaces de atender lo urgente y lo importante, siendo lo antártico parte de lo importante, y algo a lo cual, si el presidente no le pone la prioridad, quedará relegado al olvido o a más de lo mismo.

Seamos claros: si nos creemos el cuento de verdad, el Chile antártico representa el 63% del territorio nacional. Eso bien merece los esfuerzos que se hacen actualmente, más las inversiones que se están haciendo en Punta Arenas y Puerto Williams, los buques de la Armada destinados a dar soporte, patrullar los mares australes, y las aguas chilenas antárticas; las aeronaves que necesita la FACH para conectar, mover gente y carga desde Punta Arenas hacia la Antártica; los militares, marinos y aviadores destinados al territorio y, por sobre todo, las instalaciones en el mismísimo Polo Sur, así como mejorar las que existen en Glaciar Unión, recuperar la Villa Las Estrellas y muchas otras cosas más necesarias para ser consecuentes con ese 63% de Chile, al que se le destina poco o nada de presupuesto.

Un viaje presidencial por cada periodo es el “desde”. Lamentablemente, la contingencia ensució lo importante que es la primera vez que un Presidente chileno pise el Polo Sur, pero ello no le quita mérito al hecho y así quedara registrado en los libros de historia: que Gabriel Boric fue el primer Presidente chileno en llegar al Polo Sur.

Bien por la FACH que organizó y materializó el viaje, un viaje que destaca por su prolijidad y profesionalismo, pero que también nos demuestra que desde Punta Arenas al Polo Sur hay más de 4 mil kilómetros, casi lo mismo que hay de Arica al Cabo de Hornos. Atender ese 63% del territorio chileno, que está ubicado en la Antártica, no es algo simple, pues requiere recursos, capacidades, infraestructura y entrenamiento.

En memoria del general Ramón Cañas Montalva, Óscar Pinochet de la Barra, el Presidente Pedro Aguirre Cerda, el Presidente Gabriel González Videla, y de los integrantes del INACH, de las Fuerzas Armadas, y de todos aquellos que han hecho de la Antártica Chilena una prioridad y una realidad.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.

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