Publicidad
Papa Francisco: de los zapatos negros a la reforma estructural Opinión

Papa Francisco: de los zapatos negros a la reforma estructural

Publicidad
Jorge Blake
Por : Jorge Blake Vocero de Voces Católicas Chile
Ver Más

El pontificado de Francisco fue un constante impulso reformador. Desde los símbolos hasta las estructuras, buscó sacudir inercias y reconectar a la Iglesia con el Evangelio y las realidades del mundo actual.


“Desde casi el fin del mundo”, así se presentó al mundo Jorge Mario Bergoglio en 2013. Su elección, tras la inédita renuncia de Benedicto XVI y en un contexto de crisis institucional, despertó una enorme expectativa de cambio. Francisco no solo cumplió esa expectativa, sino que la superó. Su pontificado resultó profundamente renovador, rompiendo moldes mucho más allá de lo estético, abordando cuestiones de fondo para la necesaria reforma de la Iglesia católica. 

La revolución comenzó por los gestos, cargados de simbolismo. Como tantas veces se ha destacado, rechazó los tradicionales zapatos rojos papales por sus habituales negros. Optó por la Casa Santa Marta en lugar del suntuoso Palacio Apostólico, buscando vivir “entre la gente”. Sorprendió al ir a pagar personalmente su cuenta en la residencia donde se alojó antes del cónclave. Repitió su costumbre de Buenos Aires de lavar los pies en Jueves Santo, eligiendo a personas privadas de libertad, enfermos o refugiados.

Estos actos no fueron meras anécdotas; fueron la manifestación visible de un nuevo estilo: una Iglesia más humilde, cercana, cuya autoridad emana del servicio.

Esta “revolución de los gestos” fue la antesala de reformas estructurales de gran calado. La Constitución Apostólica Praedicate Evangelium reconfiguró la Curia Romana, no como un simple ajuste administrativo, sino como una “conversión misionera”. Puso la evangelización en el centro absoluto, creando un Dicasterio específico para ello. Y en un paso audaz, estableció que cualquier fiel bautizado competente, laico o laica, puede dirigir un organismo vaticano, disociando parcialmente la potestad de gobierno del sacramento del Orden.

Este impulso transformador se reflejó también en la promoción de la sinodalidad. Con Episcopalis Communio, revitalizó el Sínodo de los Obispos, convirtiéndolo en un proceso dinámico que parte de la escucha de todo el Pueblo de Dios en las diócesis, buscando una Iglesia que “camine junta”. Afrontó la necesidad de transparencia financiera, creando nuevos organismos de control y supervisión, con el objetivo de una gestión económica ética y al servicio de la misión.

Su audacia se extendió a lo pastoral. Con Amoris Laetitia, abordó las nuevas realidades familiares, abriendo caminos de discernimiento y acompañamiento para los divorciados vueltos a casar que podrían llevar, en ciertos casos, al acceso a los sacramentos, subrayando la primacía de la misericordia. Con Laudato Si’, instaló la “ecología integral” como eje de la Doctrina Social, vinculando inseparablemente la crisis ambiental con la social, el “grito de la tierra” con el “grito de los pobres”.

Promovió decididamente a las mujeres, nombrándolas en puestos de liderazgo inéditos en la Curia Romana y abriendo ministerios laicales. Intensificó el diálogo interreligioso, logrando un hito con la firma del Documento sobre la Fraternidad Humana junto al Gran Imán de Al-Azhar.

El pontificado de Francisco fue un constante impulso reformador. Desde los símbolos hasta las estructuras, buscó sacudir inercias y reconectar a la Iglesia con el Evangelio y las realidades del mundo actual. Generó adhesiones profundas y resistencias marcadas, prueba de la envergadura de los cambios. Su legado es el de un Papa que “inició procesos”, desafiando a la Iglesia a ser más misionera, sinodal y misericordiosa: una auténtica “Iglesia en salida”.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.

Inscríbete en nuestro Newsletter El Mostrador Opinión, No te pierdas las columnas de opinión más destacadas de la semana en tu correo. Todos los domingos a las 10am.

Publicidad

Tendencias