El primer mandatario recibió amplias muestras de apoyo en el Senado por las declaraciones que realizó, para responder a los dichos de Hugo Chávez y a la intervención de Carlos Mesa, en la Cumbre de Monterrey. Mientras, el líder cocalero recibe resguardo policial en su visita a Chile.
Aunque la oposición había señalado que el presidente Lagos «rendiría examen» en la Cumbre de Monterrey, respecto del manejo de las relaciones diplomáticas con Bolivia, ayer el mundo político en pleno respaldó la postura chilena y dio su apoyo a la oferta del primer mandatario al país altiplánico y su insistencia en que, sobre soberanía, no hay temas pendientes.
No obstante, el presidente Lagos tildó de poco adecuada la postura que tuvo el gobernante boliviano, Carlos Mesa, al plantear el tema de la mediterraneidad en la Cumbre de Las Américas. Lagos afirmó que existen conductos regulares para tratar los asuntos bilaterales, entre los que no se encuentran los foros internacionales.
"Lamento lo ocurrido en Monterrey, porque estos son espacios para avanzar en temas colectivos y multilaterales, y para avanzar en temas que corresponden a dos países están las relaciones diplomáticas", dijo.
Por lo mismo, el Gobierno volvió a plantear la posibilidad de reestablecer las relaciones diplomáticas con Bolivia, con el fin de iniciar el diálogo para buscar una solución a su demanda en términos bilaterales.
Además del conflicto que los dichos de Mesa provocaron en la delegación chilena que asistió a la Cumbre, se sumaron los del primer mandatario venezolano, Hugo Chávez, quien aseguró que Lagos no decía la verdad sobre el diferendo con Bolivia.
La canciller Alvear se refirió a las declaraciones de Chávez diciendo "que el embajador chileno en Caracas, Fabio Vío, se mantenga en consulta en Santiago es una señal clara para el gobierno Venezolano".
Las declaraciones del presidente Lagos frente al tema boliviano y a las declaraciones de Chávez motivaron un amplio respaldo entre los senadores de todos los partidos políticos. El presidente de la comisión de Relaciones Exteriores, Ricardo Núñez (PS), dijo que la intervención de Lagos había sido muy exitosa porque "ha quedado claro que el país quiere reestablecer las relaciones con Bolivia y que Carlos Mesa cometió un error táctico al negarse a esa posibilidad, porque de esa manera se podría avanzar muchos más rápido".
En el caso de las declaraciones de Chávez, Núñez dijo que la situación era más complicada porque "el presidente venezolano ha insistido en mantener una posición beligerante con Chile".
Para el senador de RN, Sergio Romero, "la posición que ha adoptado el Gobierno es la correcta, porque interpreta fielmente el sentir y el pensamiento del pueblo chileno".
Nueva preocupación: Evo Morales en Chile
La preocupación actual del Gobierno gira en torno a la visita que el dirigente social Evo Morales hará a Chile como invitado a participar en el seminario "Océanos, América del Sur y Desarrollo Sustentable" organizado por la Fundación Oceana.
Morales declaró a radio El Mundo de Argentina que no descartaba un posible conflicto bélico con Chile si no se resuelve el tema de la salida marítima por la vía diplomática. Sin embargo, él mismo se desmintió al asegurar que "yo jamás he hablado de guerra, ayer ni anteayer, lo que siempre he dicho es que entre dos países vecinos tenemos que vivir en hermandad y no enemistad. Es una posición definida del movimiento indígena boliviano".
Las declaraciones de Morales hicieron que la Fundación Oceana, responsable de la visita del líder cocalero, solicitara protección especial para resguardar la integridad del diputado boliviano.
La petición fue concedida por las autoridades que, a través del ministro Secretario General de Gobierno, Francisco Vidal, aseguraron que Morales contará con protección policial durante su estadía en Chile.
Ante la petición de medidas de seguridad especiales para Morales, que se ha declarado antichileno en varias oportunidades, Vidal aseguró que «éste es un país libre y democrático donde todos pueden circular libremente», por lo que el Gobierno tiene el deber de garantizar su libre desplazamiento.
Esta no es la primera visita que realiza Evo Morales a Chile. En julio de 2002 asistió al Congreso de Americanistas, que se realizó en el edificio Diego Portales, organizado por la Universidad de Chile. En esa oportunidad no sólo participó del Congreso, sino que subió por el ascensor del Ministerio de Defensa hasta una de las dependencias de la cartera, donde se reunió con miembros civiles del ministerio.
El año pasado, antes que explotara el conflicto del gas, el líder cocalero también estuvo en Chile, reuniéndose entonces con organizaciones gremiales y sindicales.
Una reunión que nunca existió
La reunión que Evo Morales tendría con la mesa directiva del Partido Por la Democracia, el sábado 17, fue suspendida por el dirigente boliviano. De acuerdo a fuentes del PPD Morales se habría molestado por las declaraciones que dirigentes de esa colectividad realizaron criticando su pensamiento sobre la mediterraneidad. Al mismo tiempo aseguraron que la suspensión del encuentro no es relevante porque el partido oficialmente nunca manifestó su deseo de reunirse con él.
En la Fundación Océana, sin embargo, desestiman que tal encuentro haya estado considerado en la agenda que Morales tiene en Chile. La entidad reconoce que enviaron invitaciones a diversos partidos políticos para concertar encuentros con el diputado boliviano, pero aseguran que ni el PPD, ni ninguna otra colectividad confirmó la cita.
Por lo mismo, la Fundación sostiene que la actividad cancelada por el propio Morales es un hecho anecdótico porque no se puede suspender un encuentro que jamás estuvo concertado.
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