Publicidad

Cheyre: «Un Ejército en democracia no hace defensas corporativas»

Publicidad

Esta tarde, en conferencia de prensa, el comandante en jefe, quien en la madrugada llegó de Sudáfrica, expresó que «mi deber era informar, aclarar cualquier duda que se tenga, con ese deber creo haber cumplido siempre». Además dejó en claro que ni este hecho ni el de Antuco empañan su gestión.


El Comandante en jefe del Ejército, general Juan Emilio Cheyre, manifestó que la obligación de una institución castrense en democracia es transparentar la información aunque eso signifique sancionar a militares.



De esta manera se refirió, el jefe militar a la tragedia de la Antártica, cuyos antecedentes fueron divulgados en exclusiva por El Mostrador.cl.



«La normalidad de un Ejército en democracia es no al oscurantismo, no a negar información, no a defensas corporativas, no a evitar que se conozca la verdad, por dura que sea, no a andar ocultando información, por eso es que hoy tenemos resultados, por eso es que el primer día se hace parte el ministerio público militar y el primer día de conocido la cuenta del fiscal vamos tras el asunto», dijo.



Según Cheyre su deber era informar, aclarar cualquier duda y «con ese deber creo haber cumplido siempre». Además, dejó en claro que ni esta tragedia ni la de Antuco empañan su gestión.



El general, quien llegó esta madrugada desde Sudáfrica, indicó que «de mi dirección como comandante en jefe me siento muy sereno porque jamás he faltado a sus principios, y que durante mi mando haya habido problemas como éste, por supuesto que me apena».



«Estas cosas que son tan tristes ayudan a que sean más rápidos los cambios que se necesitan en la mentalidad de las personas», manifestó.



El fiscal militar de Punta Arenas, Marcos Ibacache, procesó el pasado 12 de enero a los tenientes coroneles Armando Ibáñez y Mauricio Toro, en calidad de autores incumplimiento de deberes militares y cuasi homicidio, por el accidente en el que murieron tres militares.



La tragedia de septiembre costó la vida al capitán Enrique Encina y a los suboficiales Fernando Burboa y Jorge Basualto tras caer a una grieta en el hielo de al menos 30 metros de profundidad.



La investigación da cuenta de que el día del accidente los uniformados no cumplían una misión oficial, sino que habían vuelto al lugar en busca de un trineo que habían perdido en una expedición anterior. Además, los tres militares perdieron la vida por hipotermia y no por las heridas que les provocó la caída, como sostuvo en su momento el Ejército.



Además, Ibáñez hizo una orden para justificar la misión de recuperación del trineo y como ésta debía llevar necesariamente la rúbrica del capitán Encina (fallecido en el accidente), agregó a la hoja otra orden antigua, donde sí estaba la firma del oficial y lo anexó a la orden falsa.

Publicidad

Tendencias