Eduardo Frei calificó de «inaceptable» la colusión de las farmacias y pidió «cárcel» para «los que han lucrado con la salud». Sin embargo, el sociólogo ex MAPU, a cargo de los contenidos de su campaña, asesora a una de las tres farmacias cuestionadas. Algunos expertos hablan de incompatibilidad aunque él no la ve. Y el caso de Mark Penn, el estratega jefe de la campaña de Hillary Clinton que debió renunciar a su cargo por hacer lobby para un TLC con Colombia mientras su jefa lo rechazaba, resuena en el ambiente.
El jueves 26 de marzo Eduardo Frei Ruiz-Tagle estaba en Rancagua realizando una actividad de campaña cuando le consultaron por la acusación de colusión de Salcobrand, Ahumada y Cruz Verde, las tres cadenas de farmacias que concentran más del 90% del mercado y están en el ojo del huracán por la eventual coordinación del alza de precios de 222 medicamentos. «Es inaceptable», respondió y, cuestionando su silencio, llamó a Sebastián Piñera a pronunciarse por el caso, que explotó en las manos del abanderado de la derecha debido a las acciones que tenía en Farmacias Ahumada.
Luego, en un tono que no dejó espacio a equívocos, el candidato presidencial de la Concertación agregó: «En otros países del mundo esto (la colusión) sería un delito e irían a la cárcel los que han lucrado con la salud, especialmente la de los adultos mayores de este país».
Pese a las duras declaraciones de Frei, dos días antes el jefe del área de Contenidos de su campaña, Eugenio Tironi, participó en una reunión en las oficinas de Luis Enrique Yarur, quien controla Salcobrand. El motivo: analizar como sortear la acusación de colusión reconocida por Farmacias Ahumada ante la Fiscalía Nacional Económica (FNE) y manejar la crisis de imagen que se tradujo, incluso, en apedreamientos de algunos locales por parte de consumidores enfurecidos.
Junto a Tironi, en pleno barrio El Golf, se hallaban los tres hermanos Yarur (Luis Enrique, Juan Carlos y Carlos Alberto), los miembros del directorio de Salcobrand y sus abogados del estudio Vial y Cía. Tironi, según versiones de prensa, fue contratado especialmente para el manejo de las comunicaciones en este caso, de la misma forma en que la cadena de Guillermo Harding, Cruz Verde, reclutó al lobbista y ex ministro, Enrique Correa.
La diferencia entre ambos ex militantes del MAPU dedicados a la consultorías en comunicación estratégica es que Correa no ha podido acercarse a Frei, como sí lo hizo Tironi a comienzos de marzo, cuando se convirtió en Jefe de Contenidos de la campaña del candidato presidencial oficialista.
Regulados y reguladores
La relación de Tironi, también columnista de El Mercurio, con el comando de Eduardo Frei y su asesoría a Salcobrand, fue abordada por Juan Pablo Hermosilla, el segundo hombre de Océanos Azules, el grupo programático de Frei, en la última edición de Qué Pasa. Cuando le preguntaron por los cuestionamientos a Piñera por el caso de las farmacias y el vínculo de Tironi con una de ellas, respondió: «Tiene que haber coherencia en términos generales, pero ésta tiene que ir por el lado de manejarse dentro de la Constitución. Me imagino que el caso de Eugenio es similar. Tampoco puede esperarse que nosotros, como voluntarios de Océanos Azules, renunciemos a lo que hacemos».
Sin embargo, según especialistas, el caso de Tironi sí es sujeto de análisis por las eventuales implicancias a largo plazo. Andrés Scherman, académico de la Escuela de Periodismo de la Universidad Diego Portales y magíster en Sociología, explica que en el doble vínculo de Tironi con Salcobrand y la campaña de Frei no hay «un conflicto de interés evidente» porque la decisión sobre la colusión de las farmacias «está radicada en el Tribunal de la Libre Competencia, un tribunal ajeno al gobierno, y si las farmacias deciden apelar a su fallo, ese tema se irá a la Corte Suprema».
Pero sí lo hay, dice, en otra situación igualmente vigente. «Tironi es miembro del directorio de Enersis, una empresa regulada y que controla a Endesa, que lleva adelante el proyecto HidroAysén, donde todo pasa por decisiones regulatorias de la autoridad. Ahí veo un caso de conflicto de interés», detalla el experto en Comunicación Estratégica.
El extraño caso de Mark Penn
A diferencia de Scherman, un reputado cientista político que pide anonimato por sus lazos con el oficialismo, sí opina que la relación Tironi-Salcobrand-Frei es complicada: «Claramente si Tironi trabaja para Salcobrand no debería trabajar para Frei. Ahí hay un tremendo conflicto de interés y los ejemplos comparados son muchos para demostrarlo. El caso más paradigmático es el de Mark Penn».
Penn es el CEO mundial de Burson Marsteller, mega compañía de comunicaciones corporativas que también cuenta con oficinas en Chile, y ha sido bautizado por los medios con apodos como «El maestro del mensaje» y «El rey de las encuestas».
A comienzos de 2008, sin dejar sus consultorías de lado, Penn se convirtió en el estratega jefe de la campaña de Hillary Clinton para ser nominada como candidata demócrata a la Presidencia. Pero debió renunciar en abril de 2008 luego que se supiera que trabajaba para el gobierno de Colombia haciendo lobby en Estados Unidos a favor de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países. Algo que contravenía la posición de Clinton, quien durante su campaña se manifestó contraria a nuevos TLC.
Entonces, Dylan Loewe, uno de los editorialistas del influyente blog The Huffington Post, escribió una dura columna celebrando el «despido» del gurú de Burson Marsteller: «Hubo bastantes razones para despedir a Mark Penn y la menor de ellas no fue su obvia incompetencia. Más que todo, Mark Penn merecía ser despedido porque vio a Hillary Clinton como una cliente más. ¿Quién no quisiera la oportunidad de ayudar a alguien a elegirse como Presidente, la oportunidad de dejar una marca permanente, un legado duradero? Pero para Penn, la campaña de Clinton era sólo un cliente que había comprado sus servicios, y que no era diferente al gobierno colombiano, o a Exelon o Blackwater».
Pero el propio Tironi, consultado por El Mostrador, señala que «efectivamente mi oficina asesora a diversas empresas e instituciones del más amplio espectro, y esto no lo ocultamos a nadie, menos si vemos que puede haber un conflicto de interés. No sé como funciona en la OCDE, pero así funcionamos nosotros. Lo de Frei es un asunto personal, y por cierto que yo, como cualquier persona, tiene otras identidades y roles que entran en el juego, y la vida consiste en discernir para irlos separando».
Las importantes consultorías de Tironi
La llegada de Tironi al comando fue precedida por el aterrizaje de Pablo Halpern, ex director de la Secretaría de Comunicaciones y Cultura, SECOCU, del gobierno de Frei Ruiz-Tagle, quien despierta «anticuerpos» en algunos colaboradores del candidato DC y recelo en las cúpulas partidarias de la Concertación que no están dispuestas a que la campaña se estructure sin la participación protagónica de las colectividades oficialistas.
Halpern, quien tiene amplias redes transversales en el mundo político y privado, oficializó su arribo al comando el 2 de marzo durante una reunión en dependencias de la Fundación Frei Montalva y de inmediato sumó a Tironi al equipo de comunicaciones.
Durante el gobierno de Aylwin, mientras Enrique Correa oficiaba de vocero y negociador de las tirantes relaciones con Augusto Pinochet, Tironi fue director de Comunicaciones de La Moneda.
Más tarde fundó su empresa Tironi Asociados y comenzó con las asesorías público-privadas. En el sector empresarial sus más sonadas consultorías fueron a Endesa España a su llegada al mercado chileno, otra al Banco Santander, las realizadas para Sonda (la empresa que se adjudicó el sistema tecnológico del Transantiago) y la minera Anglo American, o el manejo de imagen y comunicación de crisis para Celco durante el caso de los cisnes de cuello negro de Valdivia. Además, en la actualidad su empresa cuenta entre sus clientes a Telefónica, empresa a la que renunció su gerente general, el español José Moles, quien se sumó a Océanos Azules y fue uno de los coordinadores de la gira por España del candidato oficialista.