El jefe de comunicaciones del abanderado de la Concertación es blanco de fuertes críticas internas pero ha consolidado su poder, desplazando uno a uno a otros personajes del epicentro de la toma de decisiones. Así como en su minuto en el entorno de Marco Enríquez se catalogó a Rodrigo Danús de “activo tóxico” en Bilbao 1159 reinan la desconfianza, el desánimo por las últimas dos encuestas, las disputas y las sospechas de filtraciones mediáticas por parte del principal asesor del candidato. Aquí, todo lo que piensan y nadie dice de Halpern en la campaña oficialista.
“Hay un tema con Pablo. Halpern produce unidad. Porque cuando tienes que tener la espalda contra la pared miras para el lado y ves que hay varios más en tu misma situación”. Así ejemplifica un integrante clave del comando de Eduardo Frei el clima de desconfianza que, según él, reina entre los distintos equipos de trabajo de la campaña y el jefe de comunicaciones y principal asesor de Frei. El tema no es nuevo. Pero por primera vez las quejas en contra de Pablo Halpern afloran masivamente en el corazón del comando y no desde Océanos Azules o los partidos oficialistas, como ha sido la tónica.
De partida aseguran que se acabaron los días en que Sebastián Bowen y Halpern eran uña y mugre. El tiempo en que el ex director social de Un Techo Para Chile fue convocado por el experto en comunicaciones y presentado como coordinador ejecutivo de la campaña, buscando acercar a Frei con el segmento de votantes juveniles. Hoy apenas se comunican una vez a la semana.
La relación de ambos, dice un testigo de la casona con el número 1159 de avenida Bilbao, se enfrió desde que Bowen se hartó de las filtraciones de prensa, por las cuales responsabiliza a Halpern con la idea de que lo quiere meter al congelador, y buscó establecer un canal de comunicación directa con Frei o a través del PS Eduardo Jara, hombre de confianza del candidato, que lo acompaña en todas las actividades. Además, en el último período el ex niño símbolo de la renovación generacional de la candidatura oficialista ha buscado estrechar vínculos con Jorge Pizarro y Jorge Burgos, a la vez que conversa con Ricardo Lagos y Ernesto Ottone. Según un cercano, en privado, ha dicho que son como una especie de “padrinos”, y está convencido que “hay que dejar las intrigas y trabajar en terreno como Frei”, añade la misma persona.
El factor de conflicto con Halpern es el mismo que mencionan integrantes de varias áreas del comando: el afán del jefe de comunicaciones por “controlarlo todo”, estar en la lógica del conflicto y ser poco receptivo a las ideas ajenas. “Lo que es distinto, para Pablo equivale a una amenaza. Además, nunca sabes si lo que dice a nombre de Frei es cierto”, sintetizan.
Incluso desde la vereda de enfrente, aprovechan de hacer leña de lo que se percibe del equipo de Frei. Este jueves, Andrés Allamand dijo que Halpern y Tironi “borraron a Bowen del mapa y colocaron ahora a la madre de la Presidenta”. Y si bien el lunes el efecto comunicacional de la llegada al comando de Laura Albornoz y Ángela Jeria, fue relevante para relacionar a Frei con Michelle Bachelet mientras se desarrolla el trabajo de campo de la encuesta CEP, éste se vio afectado el martes por la publicación de la encuesta CERC, que dio un empate de 20 puntos para Frei y Marco Enríquez en primera vuelta, y el miércoles por la Ipsos, que indicó empate técnico entre Enríquez y Piñera en segunda vuelta.
Sin sueños
En las reuniones de coordinación, lideradas por Halpern y Eugenio Tironi –a quien los entrevistados califican como el más receptivo-, se proponen actividades e ideas de campaña que son rápidamente desechadas por Halpern o modificadas a tal punto que luego hay que echar pié atrás, aseguran varios consultados del comando.
Caso emblemático es el de Martín Vinacur. A fines de septiembre el publicista argentino renunció a continuar como director creativo publicitario de la campaña de Frei aduciendo desacuerdos en “lo económico”. La salida del creativo ocurrió justo cuando el equipo del abanderado oficialista, liderado por Halpern, había empezado a grabar la franja televisiva con el director de cine Ricardo Larraín.
Vinacur y Halpern se conocieron durante la campaña de Bachelet. Por lo mismo tenían una buena relación y se reunían con frecuencia para abordar los conceptos detrás de la franja del senador DC. Sin embargo, el 3 de agosto, día en que se le presentó a Frei el eslogan “Vamos a vivir mejor, Vinacur estuvo ausente. Según miembros del comando ese eslogan, que Halpern impuso en base a estudios de los cuales extrajo la idea de que “la gente dejó de tener sueños”, iba en dirección contraria de las propuestas de Vinacur, lo cual habría incidido en su opción de dar un paso al costado.
Aunque no ha tomado una decisión de ese tipo, también es vox pópuli en la campaña que la diseñadora Piedad Rivadeneira, quien encabeza el área gráfica, y fue autora de la campaña y el eslogan “Estoy contigo” de Michelle Bachelet, tampoco está cómoda con el estilo Halpern y la manera en que se toman las decisiones. En su caso, debió someter la propuesta gráfica a la opinión de Magdalena Frei, la hija del candidato, y hacer contrapropuestas hasta consensuar la flecha roja con fondo café claro que se puede ver en paletas publicitarias y algunos letreros, debido a que los dineros para financiar la campaña han sido menos de lo esperado.
La campaña, medio emparentada al constructivismo ruso, esta semana reflejó en el sitio web de Frei nuevos colores que habrían sido parte de la primera propuesta de Rivadeneira. El nuevo “look” también debería lanzarse en breve en la gráfica callejera.
“Mientras muchos estamos por mostrar que sí se puede hacer algo nuevo, con propuestas, el “Vamos a vivir mejor” quizá da seguridad pero no tiene épica. Es la lógica antisueños”, critica otro profesional del comando. Su balance en términos comunicacionales es que “el problema de la campaña en este momento es que las peleas y descoordinaciones son la campaña”.
Tironi versus Halpern
Aunque fue Halpern quien llevó a Tironi al comando en marzo pasado, integrándolo como jefe de contenidos, durante estos meses han tenido varias diferencias de criterio que no se han hecho públicas y que han logrado mantener bajo cuerda, inclusive en su relación directa durante las reuniones de trabajo de coordinación. No obstante, al sociólogo y ex jefe de la campaña de segunda vuelta de Ricardo Lagos se le ha oído manifestar en privado, en momentos de tensión, que “la única agenda de Halpern es Halpern”.
Asimismo, cuando el jefe de comunicaciones de Frei dio una entrevista en el podcast Mediápolis diciendo que la foto que el abanderado presidencial se sacó el lunes 17 de agosto con los timoneles de los partidos de la Concertación fue «letal» y significó ante la opinión pública «dos pasos para adelante y tres para atrás», Tironi lo evaluó “negativamente”, por decirlo de forma elegante.
La foto fue resultado de una dura negociación en la trastienda, como una señal a los partidos, con el objetivo de cerrar un mes para el olvido, con Gómez reclamando por la falta de protagonismo del Partido Radical y Pepe Auth y Guido Girardi criticando el programa de Frei por “poco progresista”. Todo, en medio del trabajo de campo de la encuesta CEP dada a conocer en septiembre.
La aparición de Halpern reconociendo “un problema político muy grave y muy estridente” y rematando que la foto fue una solución para “una pugna muy fea” por la cual pagaron “un costo de cara a la opinión pública”, irritó sobremanera a los aludidos, quienes conocen el recelo del ex asesor del BID hacia los partidos y los operadores políticos, porque expuso los problemas de la campaña con el oficialismo. En ese contexto, Frei se vio obligado a llamarle la atención a Halpern, quien debió desdecirse en una carta a La Tercera, mientras Gómez, Auth, Camilo Escalona y Juan Carlos Latorre desacreditaron sus dichos. Gómez hasta se dio el gusto de preguntar “¿Quién es Halpern?”.
Y aunque Tironi aparece desplazado en esta pasada, saliendo del primer anillo poder y siendo relegado sólo a asesorar la franja televisiva, existe la percepción en el comando de que Tironi secretamente aspira a tomar el timón si Frei pasa a la segunda vuelta presidencial, tal como lo hizo en la campaña de Lagos, cuando reemplazó a Carlos Ominami, Marco Enríquez y a la madre del “díscolo” Manuela Gumucio. Uno de los argumentos mencionados es que en las últimas semanas el sociólogo ha sondeado profesionales concertacionistas de su confianza para que laboren con el comando.
Efecto teflón
Las críticas a Halpern se han constituido en una costumbre desde que el 2 de marzo arribó al comando empoderado por su relación casi de trato filial con Frei y la confianza de la familia del candidato.
Primero fue la pugna en sordina por el estilo “rojo” (de confrontación) o “azul” (de propuestas) con los cabecillas del grupo programático Océanos Azules, Juan Pablo Hermosilla, Pablo Ruíz-Tagle y Guillermo Pickering. Con este último tienen cuentas pendientes desde el primer gobierno de Frei, cuando Halpern era director de la Secretaría de Comunicación y Cultura (SECOCU) y se filtró a la prensa que tanto Pickering, entonces subsecretario de Obras Públicas, y Edmundo Pérez Yoma se habían referido en reuniones privadas a la “troika judía” que conformaban al interior del gobierno Jorge Rosenblut, Eduardo Bitrán y Halpern.
Luego, vinieron las quejas de los partidos por su supuesto afán de “esconder” a Frei, el impasse con Chilevisión cuando acusó a los periodistas de Tolerancia Cero de tener “conflictos de interés” por trabajar en el canal de propiedad de Sebastián Piñera, el “Karen-gate” y las acusaciones al candidato de la Alianza por la quiebra del Banco de Talca. Pero ninguno de estos temas ha resquebrajado su vínculo con Frei.
“Tiene el llamado efecto teflón”, dice otro más de sus críticos. “Todo le resbala, ninguna de las encuestas negativas ni las críticas que recibe de acá dentro le hacen mella. Y si llega Velasco para la segunda vuelta, como son casi hermanos, va a seguir acá”, agrega, a raíz de la profunda amistad entre Halpern y el ministro de Hacienda. Ambos fueron al colegio juntos y el experto en comunicaciones pasaba las tardes en la casa de los Velasco. Su relación es tan estrecha que Halpern dio el discurso cuando el economista se casó con Consuelo Saavedra en 2003. También fue uno de los interlocutores del secretario de Estado, en las gestiones del préstamo de US$ 400 millones del BID al Transantiago. Es tan así, que una fuente de La Moneda estima que el tándem Halpern-Velasco es de los pocos que quedan en la política chilena.
Si Frei pasa a segunda vuelta, el desembarco del ministro de Hacienda como jefe de campaña es algo que dan casi por descontado en la casona del comando de calle Bilbao. Allí, asumen con los dientes apretados, que de ser así podría haber Halpern para rato.
Artículos relacionados:
ME-O alcanza a Frei y se confirma duda sobre quién pasa a segunda vuelta
La duda post CERC: ¿Piñera se impone en primera vuelta?
UDI atribuye resultados de la CERC al “cansancio de los chilenos con la Concertación”
Tironi advierte: Las encuestas “son y serán malas” para Frei
Encuesta Ipsos: Piñera y ME-O empatan en segunda vuelta