La Marina ha sido la institución de las Fuerzas Armadas más perjudicada tras el devastador terremoto del 27 de febrero, luego de los cuestionamientos que se le han hecho tras el tsunami. Sin embargo, se anunció reestructurar la actual conducción y dependencia del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico (Shoa) con el objeto de recuperar su credibilidad y asumir una capacidad de respuesta ante catástrofes.
El comandante en jefe de la Armada, almirante Edmundo González, asegura que su institución se encuentra dolida por ciertos hechos que comprometieron aspectos de seguridad en el desempeño naval.
Lo anterior, principalmente por las críticas que se le ha hecho a la Marina por su actuación tras el terremoto y el posterior tsunami, el cual le quitó la vida a una gran cantidad de personas.
“La institución está afectada. Eso es un hecho. Estamos afectados e indudablemente heridos por ciertos hechos que comprometen aspectos de seguridad en el desempeño naval. En lo estratégico, por las debilidades que hemos evidenciado en nuestros sistemas de enlace terrestre, fundamentalmente. En lo humano, por las fallas producidas en el SHOA, determinadas por variables tecnológicas y capacidad de evaluación. Indudablemente que eso puso en entredicho la credibilidad del SHOA, que es una organización que es prestigiada en el ambiente marítimo oceanográfico e hidrográfico internacional. Y respecto de la infraestructura, nos preocupa nuestra principal base naval de Talcahuano y nuestro astillero. Hay un fuerte impacto ahí”, precisa en una entrevista a El Mercurio.
Sin embargo, sostiene que la institución se encuentra con todas sus capacidades combativas intactas y con la confianza depositada en sus dotaciones.
“Pero lamentablemente tuvimos dos muertos en nuestra base naval, que es una señora con su hijo nonato, que murió -no por el terremoto ni por el tsunami -, sino porque se le apresuró su parto y murió durante la operación. Por otro lado tenemos un número -en este momento en evaluación- de cuarenta desaparecidos. No se han reportado a sus respectivas unidades y reparticiones. Entonces, no puedo asegurar que no tengamos bajas aún, lo que por cierto me tiene particularmente preocupado. Yo me apersoné apenas ocurrida esta catástrofe al lugar del epicentro donde más daño institucional hubo, a nuestra gente, a nuestras instalaciones y a nuestros astilleros. Debemos hacer un análisis global de nuestras responsabilidades en lo técnico y en lo humano”, precisó.
Respecto a si está dispuesto a asumir responsabilidades de eventuales fallecimientos en otras instancias, tal como lo hizo con las víctimas del tsunami, el almirante señala que “eso puede ser un escenario probable, pero espero que las investigaciones y la fuerza de los argumentos sea lo que descarte esa condición. Estoy tranquilo y confiado en que el espíritu comprometido en nuestro actuar, que siempre ha privilegiado la vida humana de nuestra población, será en definitiva lo que refuerce la defensa de nuestra institución y su gente. Estaremos en breve plazo entregando los antecedentes de la investigación, la cual puede tener la certeza de que evidenciará que no ha habido negligencia en el actuar. Puedo decir que no ha sido la institución la responsable de la pérdida de vidas humanas. En este caso, la fuerza de la naturaleza nos impactó y superó nuestras capacidades para reaccionar con prontitud”.
Asimismo, González asegura que se está realizando una investigación técnica para averiguar las causas de la cancelación temprana de la alerta de tsunami, cuyo fiscal es un vicealmirante.
“Se harán todas las averiguaciones en ese caso. Porque hasta la activación de las alertas, la función del SHOA iba perfectamente bien. Aquí no sacamos nada con tener un SHOA de última tecnología si no logramos que sea una solución integral y que debieran estar todos los organismos del Estado sintonizados con este asunto. Yo coincido con lo planteado por el Presidente electo, Sebastián Piñera, que aquí la Onemi debiera ser, aparte de la reestructuración y modernización que sea necesario hacerle, un organismo centralizador en este tipo de cosas. Hay que entender que el SHOA es un organismo técnico, no es un organismo ejecutivo”, mencionó.
Ante la pregunta su puede haber influido el llamado de la Presidenta al Shoa en la cancelación de la alerta, dada la jerarquía de quien hizo ese llamado, González dijo que “si yo me voy, como comandante en jefe, al submarino O’Higgins y estoy con ese comandante, indudablemente que mi presencia podría incidir en apresurar evaluaciones y decisiones, pero yo no quiero entrar en ese aspecto. Yo lo que quiero decir es que los antecedentes técnicos son técnicos. Las decisiones de mando son de mando y las decisiones ejecutivas deben ser ejecutivas, cada una en su nivel. Nuestro desafío es reconstruir la base naval».
El comandante en jefe de la Marina señala que luego de los errores cometidos tras el terremoto, resolvió reestructurar la actual conducción y dependencia del Shoa a “objeto de recuperar su credibilidad y asumir una capacidad de respuesta ante las catástrofes. Entre las medidas que tomaremos con prontitud está reforzar e implementar los sistemas de comunicación terrestre para asegurar su disponibilidad en caso de desastres naturales. Implementaremos tecnologías y estándares del siglo XXI, al nivel de Japón y Estados Unidos. Por otro lado, se está efectuando una evaluación de los efectos del maremoto en la base naval de Talcahuano, cuantificando los costos de su recuperación”.
Asimismo, sostuvo que lamentablemente la Armada no cuenta con capitanías de puerto en todas partes, pero que esta catástrofe es una experiencia que se rescata. “Debemos tener mayor presencia en las comunidades costeras. Pero esas capitanías de puerto salvaron muchas vidas, pese a que la Onemi no activó la alarma. Porque nosotros sí activamos la alerta interna, que se llama la alerta de la red Mercalli, y esas capitanías de puerto activaron a muchos retenes de carabineros, bomberos y gente a viva voz. En otros casos, como en Constitución, la ola llegó exactamente después de quince minutos o veinte minutos, y lo primero que hizo, antes de atacar al pueblo, fue barrer la capitanía de puerto”, acota.
Respecto a que si fue apresurado que el Gobierno, en voz del ministro de Defensa Francisco Vidal, señalara que hubo un error de la Armada, González no quiso comentar las palabras del secretario de Estado, pero sí aseguró que a las “Fuerzas Armadas hay que cuidarlas”.