El nuevo ejecutivo de la entidad es empresario agrícola desde hace más de 40 años, y ha estado vinculado al gremio por más de dos décadas. Durante los años 90’ desempeñó este mismo cargo bajo la presidencia de Ernesto Correa. José Miguel Steigmeier fue relacionado, según informó El Mostrador, a una red de lavado de dinero que montó el enclave alemán y que permitió al líder Paul Shaefer evadir durante años la acción judicial.
El empresario agrícola Patricio Crespo asumió este martes la vicepresidencia de la Sociedad Nacional de Agricultura, en reemplazo del cuestionado José Miguel Steigmeier que renunció el pasado 17 de marzo, luego de fallida nominación como gobernador del Bío Bío.
La dimisión de Steigmeier fue aceptada por el directorio de la SNA, designando en su lugar a quien desempeñaba hasta ahora el cargo de director y presidente del comité de aguas.
El nuevo vicepresidente de la SNA es empresario agrícola desde hace más de 40 años, y ha estado vinculado al gremio por más de dos décadas.
En los años 90’ se desempeñó como vicepresidente de la entidad bajo la presidencia de Ernesto Correa.
Stegmeier y su fallida gobernación del Bío Bío
El viernes pasado, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, anunció que el Presidente Sebastián Piñera no dio curso al nombramiento como gobernador del Bío Bío a Steigmeier tras confirmar los antecedentes entregados por El Mostrador, que lo vinculaban a una red de lavado de dinero que montó la Colonia Dignidad y que permitió al líder Paul Shaefer evadir durante años la acción de la justicia.
Esa tarde, el propio secretario de Estado reconocía la veracidad de la información publicada y la consideró como “extremadamente grave” para el Gobierno, dejando en claro que la administración no es un tribunal de justicia.
“Producto de que he podido confirmar que a lo menos parte de la información que apareció en un medio electrónico es efectiva, he tenido una reunión con señor Steigmeier y le he informado que dejamos sin efecto la intención de designarlo gobernador para la provincia del Biobío”, dijo Hinzpeter.
Ese mismo día, el fallido gobernador viajó raudamente a la capital para sostener un encuentro con Hinzpeter en el Palacio de La Moneda. A su entrada, el aludido negó tener cualquier vinculación con lo aparecido en El Mostrador.
Sin embargo, 90 minutos después, Hinzpeter daba a conocer que Steigmeier no sería gobernador y que de inmediato instruyó a su subsecretario, Rodrigo Ubilla, para que se suspenda la firma del decreto respectivo, paralizando la designación.
El cargo estará vacante, según palabras del jefe del Gabinete, hasta que se encuentre un reemplazante y lamentó la situación acontecida afirmando que “nosotros no somos un tribunal de justicia, somos un gobierno y adoptamos decisiones políticas y no pronunciamos sentencias judiciales”.
“Era un candidato respecto del cual, adicionalmente, teníamos la intención de nominarlo gobernador, lo que se materializa en la forma del decreto”, sostuvo.
La determinación del Ejecutivo fue tomada en forma clara para que la ciudadanía la entienda como una señal de la nueva forma de gobernar, que implica “hablar siempre con la verdad, tomar las decisiones que nos parezcan correctas y siempre decirlo de frente”.
