Los habitantes de Villa Baviera, que son actualmente unos 150, rechazaron la posibilidad de que el fundador del lugar, de unas 16.000 hectáreas de superficie, sea enterrado en el cementerio local.
El lugar donde será sepultado el cuerpo de Paul Schaefer, el ex suboficial alemán nazi que fundó la Colonia Dignidad y falleció este sábado en la cárcel, es hasta hoy un misterio.
El cadáver de quien se hacía llamar «Tío Permanente» en la colonia y que cumplía una condena de 20 años de prisión por abusos sexuales contra menores, además de otras sentencias, fue retirado ayer de la cárcel por su hija adoptiva, Rebeca Schaefer.
La mujer, que no ha hecho ninguna declaración, trasladó los restos del jerarca de «Villa Baviera», como llaman a la Colonia Dignidad sus moradores, hasta una funeraria del «Hogar de Cristo», en el sector santiaguino de Independencia, hasta donde llegaron algunas personas durante la noche.
El «Hogar de Cristo» está relacionada con la institución benéfica del mismo nombre, fundada por el santo jesuita chileno Alberto Hurtado, lo que resulta una paradoja, pues Schaefer era evangélico y hasta fundó en Alemania instituciones de esa doctrina antes de establecerse en Chile.
Rebeca Schaefer, que habla varios idiomas y aparentemente se ha encargado de algunos negocios de su padre adoptivo, siempre ha estado a su lado, incluso cuando fue detenido en Argentina, en marzo de 2005.
Su origen es también un misterio y una ocasión en que Paul Schaefer fue preguntado acerca de su madre biológica, respondió que eso era «un secreto profesional».
El mismo sábado, reunidos en una asamblea, los habitantes de la Colonia Dignidad, que son actualmente unos 150, rechazaron la posibilidad de que el fundador del lugar, de unas 16.000 hectáreas de superficie, sea sepultado en el cementerio local.
A lo único que accedieron los colonos fue a que los miembros más antiguos de la comunidad contribuyan con dinero para los gastos del funeral.
Mientras fue el amo y señor de la Colonia, Schaefer no pagaba a los colonos por su trabajo e incluso se quedaba con el dinero que algunos de ellos que se habían jubilado en Alemania recibían desde ese país europeo.
El diario La Tercera publicó hoy, citando «fuentes del caso», que Rebeca Schaefer habría iniciado trámites para trasladar los restos de su padre adoptivo a su país natal, tras la negativa de los habitantes de la colonia.
