Ha sido uno de los temas políticos de la semana. Para algunos esta es justamente una estrategia publicitaria, para otros la prueba de que sus escritos son sobre todo coyunturales y ya no tienen peso intelectual. Y más de alguien lo considera una deslealtad habiendo estado él en la primera línea de la campaña concertacionista. Pero nadie duda que la última entrega del sociólogo viene desde alguien que sabe muy bien lo que hace y por lo tanto es un imperdible.
Mañana en la librería Qué Leo del Patio Bellavista, el periodista Daniel Matamala lanza “1962, El Mito del Mundial Chileno”, un libro que seguramente sacará algunas ronchas por incluir detalles poco agradables de uno de los episodios más sensibles de nuestra historia deportiva. Hace algunos días, Matamala, conductor del programa político “Chile Debate”, en Canal 13, se refirió al libro “Radiografía de una Derrota” de Eugenio Tironi, que también toca un tema aún más delicado y cuyas heridas están todavía frescas: la derrota de la Concertación después de 20 años en el gobierno.
“Con las cenizas de la candidatura Frei aún humeantes, Tironi cuenta la historia desde el enfoque del intelectual, con el mismo método y rigor con el que un científico describiría un fenómeno físico”, dice Matamala en un comentario publicado en el sitio del libro junto a otras referencias favorables en tamaño grande de personajes como Roberto Méndez, presidente de la consultora Adimark (“es una historia contada con sorprendente libertad, con rigor y con la pasión de quien ha entregado a estas luchas una parte importante de su talento y de su esfuerzo vital”).
También comentan los periodistas Cony Stipicic (“Tironi responde -con algo de autocrítica- las preguntas que quedaron instaladas tras la salida de la Concertación del gobierno. Y lo hace con data sociológica, historia y las tesis propias sobre lo ocurrido y lo que está por venir en el Chile post terremoto”) y Fernando Paulsen (“la crónica de una candidatura oficialista derrotada, donde se mezclan fatalmente el pesimismo del establishment de la Concertación, el ingenuo entusiasmo de quienes son convocados a la campaña y la soterrada indolencia del propio candidato”).
Claro que el sociólogo, fundador de la consultora Tironi y Asociados, a diferencia de Matamala quien tardó ocho años en desentrañar los secretos del mundial de fútbol organizado en Chile, empezó a escribir este relato seis meses antes de que estuviera en librerías. Específicamente a fines de octubre del año pasado “cuando dejé la 1era línea de la campaña de Frei. Cuando vino el terremoto me volqué a eso, y dejé de lado este proyecto; pero después lo retomé”, según el mismo Tironi cuenta en su blog.
Pero el experto en comunicación estratégica y reconocido como uno de los ideólogos en los albores de la Concertación, no solo usó “las cenizas humeantes” y su lugar de privilegio para contar los entretelones de la campaña, sino que además tomó prestado la gráfica del sitio web de la campaña de Frei para diseñar el suyo http://eugeniotironi.cl/ , donde además se puede comprar el libro.
[cita]“Tironi es el publicista más grande de Chile. Está promocionando su libro y poniéndose en vitrina donde siempre ha estado, buscando nuevos clientes”.[/cita]
Tironi no necesita presentación y como ya se ha visto por las reseñas de su libro y su historia política conectada con el grupo más poderoso y transversal de la ex Concertación, es un tipo que levanta el teléfono y puede estar seguro que al otro lado de la línea le van a responder. Desde 2002 es director de Enersis, la filial de la multinacional española Endesa.
Y aunque ha escrito más de 20 libros, según el historiador Alfredo Jocelyn Holt “su trabajo hace mucho rato no responde a lógicas académicas ni disciplinarias. Su mirada es siempre coyuntural, responde más bien a sus posibles clientes, sus mensajes ya se pueden decodificar. Han perdido roce y frescura. Ha dicho cosas estrambóticas como el fin de la UDI o que el Mapu está muerto”.
Entre los clientes de su oficina de Comunicación Estratégica han estado importantes empresas privadas como Unilever, Celco Telefónica, Microsoft y Salcobrand, una de las farmacias acusadas de colusión justo en medio de la campaña. Precisamente uno de los conflictos que omitió en el libro. Para Jocelyn-Holt su trabajo en el sector privado ha convertido a Tironi más que en un intelectual en “un operador político, un lobbista que todavía no lo ha reconocido, a diferencia de Enrique Correa por ejemplo. Por otro lado, los libros de campaña son un género muy fascinante habituales en Estados Unidos y Francia, pero sospecho de un libro que esté escrito en menos de un año, porque no alcanza a decantar”.
Con todo, las críticas ciertamente no vienen sólo desde el mundo intelectual sino de otros protagonistas de la campaña como el senador Jorge Pizarro, quien estuvo a la cabeza del comando en la etapa final del proceso. El actual presidente del Senado dice que está esperando una copia autografiada del libro para tener un juicio más acabado. “Pero Tironi es el publicista más grande de Chile. Está promocionando su libro y poniéndose en vitrina donde siempre ha estado, buscando nuevos clientes”.
El libro obviamente generó más comentarios al interior de ex colaboradores de la campaña, como Sebastián Bowen, la gran carta juvenil del comando quien dijo que “la campaña de Frei fue mala y asumo mi responsabilidad”. En el propio Frei la aparición de “Radiografía de una derrota” despertó un indisimulado desprecio, “no lo leí ni lo voy a leer”, dijo el ex candidato.
Quién sí lo leyó fue el senador falangista Mariano Ruíz Esquide: “Me molesta mucho su falta de ética. Hay un código básico que se refiere a guardar silencio. Lo usa cuando le conviene: no revela todas las verdades respecto de su participación y verdad a medias no es verdad. Una de las desgracias de la Concertación es que apareció gente como él, que nos desorientó. Para mí, su participación fue un tema durante la campaña, pero no quise entorpecer lo que se estaba haciendo y no le di mayor vuelo a mis aprensiones. Como dicen en el campo no hay nada peor que quien enloda su propio nido”, asegura el parlamentario.
Un asesor que trabajó durante casi toda la campaña señala que “lo único que puedo decir es que en un momento de la campaña el poder de Eugenio fue total y en la franja más que total, ahora no sé que pretende». Precisamente Tironi ayer, en el programa “Terapia Chilensis” de Radio Duna, reconoció que uno de sus errores había sido estrenar la franja con una historia distinta del perfil de Frei, pensando que en otro momento tendría más rating. Pero respecto de las opiniones vertidas en esta nota, cuando se las enviamos para que las comentara, sólo respondió “gracias…. me recuerdan a los defensores de (Fernando) Karadima”.