Las actividades, cuyo costo asciende a unos tres millones de dólares, partirán el 2 de septiembre, con el «reencuentro simbólico» entre Bernardo O’Higgins y José Miguel Carrera.
El Gobierno confirmó este martes la asistencia de los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y Bolivia, Evo Morales, a los festejos para conmemorar el Bicentenario de la independencia de Chile, entre el 16 y el 19 de septiembre.
La portavoz del Ejecutivo, Ena von Baer, dijo hoy en un encuentro con corresponsales extranjeros que se ha invitado a los mandatarios de todos los países de América Latina, y confió en que durante los próximos días otros de ellos confirmen su presencia.
Von Baer expresó su deseo de que la celebración se realice «bajo el sello de la unidad nacional» y que la unión prevalezca «sobre las divisiones».
Destacó que los pueblos originarios tendrán una participación «muy activa» en los festejos, en un momento en que 51 presos mapuches, la principal etnia indígena del país, cumplen 51 días en huelga de hambre para exigir el término de la aplicación de la ley antiterrorista en sus causas.
Las actividades, cuyo costo asciende a unos tres millones de dólares, partirán el 2 de septiembre, con el «reencuentro simbólico» entre Bernardo O’Higgins y José Miguel Carrera, dos próceres de la independencia que en vida fueron acérrimos enemigos políticos.
Esto se hará con el traslado de una estatua de Carrera a la Plaza de la Ciudadanía, frente al Palacio de La Moneda, para situarla junto a una figura de O’Higgins.
El 18 de septiembre, día central de las celebraciones, el Gobierno espera que los más de 17 millones de chileno entonen al unísono el himno nacional, incluidos los 33 mineros que permanecen atrapados en un yacimiento del norte del país desde el pasado 5 de agosto.
La portavoz no confirmó si ese día el Presidente Sebastián Piñera viajará a la mina y reiteró que la principal preocupación del Gobierno es resguardar «la seguridad de los 33 mineros y la tranquilidad de sus familias».
Entre las actividades programadas destaca el izamiento de una gran bandera de 18 metros de alto por 27 de ancho a una altura de 61 metros, en el centro de la capital.
También se reabrirá el remodelado Estadio Nacional y en la sureña localidad de Concepción se inaugurará el Memorial 27/F, que rendirá homenaje a los 521 muertos y 56 desaparecidos que dejó el terremoto y posterior maremoto que asoló el centro-sur del país a fines de febrero pasado.