Ambas víctimas fueron arrolladas y lanzadas a una barricada en llamas por una camioneta cuyo conductor es intensamente buscado por Carabineros. La intendenta Liliana Kusanovic lamentó estos fallecimientos, hizo un llamado a la calma y manifestó que la ciudadanía tiene el legítimo derecho a expresarse, pero sin alejarse del camino del diálogo. La movilización se inició a la medianoche, sin luces de un posible acercamiento entre la Asamblea Ciudadana de Magallanes y el gobierno, que mantiene firme su posición de no suspender la subida del combustible dispuesta por la ENAP. [Actualizada]
La muerte de dos mujeres que protestaban anoche por el alza del gas en Magallanes marcó de manera trágica el inicio del paro indefinido convocado para la presente jornada en la Duodécima Región, el cual se ratificó en horas de la tarde del martes luego que el gobierno mantuviera firme la decisión de la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de subir en 16,8 por ciento las tarifas del gas en la zona, y no diera tampoco luces de una posible suspensión o postergación de la medida.
Representantes de la Asamblea Ciudadana de Magallanes confirmaron que la movilización estaba plenamente confirmada luego de las infructuosas reuniones que mantuvieron durante el día de ayer la intendenta regional Liliana Kusanovic y el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, con algunos alcaldes de la zona, como el de Punta Arenas, Vladimiro Mimica.
Este último ya había advertido, en una entrevista a Radio Cooperativa, que «si no hay respuesta sobre este tema, el miércoles a la 00:00 horas se detiene toda la Región de Magallanes».
Y así fue. De hecho, las protestas y la paralización de algunas actividades se adelantaron un día luego que por la tarde, y por cerca de dos horas, alrededor de 20 camiones se estacionaran en la costanera de Punta Arenas bloqueando el acceso hacia los terminales portuarios de la ciudad. A los transportistas se sumaron grupos de transeúntes que espontáneamente llegaron al lugar portando banderas negras y el emblema de Magallanes, automovilistas que hicieron sonar reiteradamente sus bocinas y hasta un grupo de “motoqueros”, todo lo cual se desarrolló en un ambiente de efervescencia, pero de manera totalmente pacífica.
Pero al caer la noche comenzaron a aparecer barricadas incendiarias y algunos desórdenes en distintos puntos de Punta Arenas. En algunos casos, informaron testigos a TVN, personal de Carabineros dispersó a grupos de manifestantes utilizando bombas lacrimógenas y también se dio cuenta de intentos de saqueos.
El hecho más grave se produjo en el sector de Rómulo Correa, donde dos jóvenes de 23 y 19 años identificadas como Melisa Silva y Claudia Castillo, respectivamente, fueron atropelladas por una camioneta de color blanco que circulaba sin luces en los momentos que protestaban alrededor de una fogata, cayendo ambas sobre el fuego.
Según versiones recogidas por la radio Cooperativa los primeros informes dan cuenta que las víctimas resultaron con politraumatismos y quemaduras graves, aunque serán los exámenes tanatológicos que se practiquen en el Servicio Médico Legal los que determinarán cuál fue la causa de muerte.
En el trágico episodio una pequeña de tan sólo dos años de edad también resultó quemada. La menor fue trasladada al Hospital Clínico de la ciudad, donde se encuentra internada pero fuera de peligro.
Carabineros realizaba esta madrugada intensas diligencias para dar con el paradero del conductor que ocasionó esta tragedia ocurrida casi simultáneamente con el inicio de la paralización regional indefinida.
La intendenta Kusanovic lamentó estos fallecimientos y afirmó que “hoy la región se encuentra de luto”. Asimismo, hizo un llamado a la calma y manifestó que la ciudadanía tiene el legítimo derecho a expresarse, pero sin alejarse del camino del diálogo.
Asimismo, informó de 26 adultos y cinco menores detenidos durante la madrugada.
La preocupación de La Moneda
Rodrigo Ubilla fue el único representante del gobierno central que viajó a Punta Arenas para hacer frente a la situación y seguramente para supervisar en terreno que se garantice el orden público en la región, como lo dispuso el martes el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.
Ayer, además, estaba latente la posibilidad que, tal como lo había insinuado el propio secretario de Estado, se aumentara en la Duodécima Región la dotación de Carabineros, lo cual hasta el momento no había ocurrido.
La preocupación del Ejecutivo estaba puesta en los anuncios de los magallánicos, que planeaban el bloqueo de las rutas al aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo, al puerto de Punta Arenas y hacia el Parque Nacional Torres del Paine, que a diario es visitado por turistas provenientes de todo el mundo.
De hecho, también estaban programadas para este miércoles manifestaciones masivas en el sector de la Zona Franca y en los alrededores del Hospital Regional.
De todas maneras, un breve comunicado de la Subsecretaría del Interior indicó anoche que Ubilla estaba abocado a “sentar las bases que permitan establecer un diálogo fecundo respecto de la problemática energética que afecta a la zona”.
“El gobierno siempre está abierto al diálogo”, sostuvo el funcionario en la nota, y agregó que “son los caminos del diálogo los que conducen a soluciones”.
Esa disposición a conversar es precisamente la que habría estado ausente y no pudo evitar que el alza del gas derivara en la movilización de los distintos sectores de toda una región, afirmó Eugenio Bahamondes, uno de los voceros de la Asamblea Ciudadana de Magallanes.
De hecho, aseguró que la Asamblea siempre ha tenido disposición al diálogo pero que no habían “recibido comunicación alguna del gobierno central que amerite deponer el paro para el día de mañana -hoy-”.